Al informar sobre la ejecución del plan y el presupuesto hasta junio, Adel Yzquierdo, vicepresidente del Consejo de Ministros y titular de Economía y Planificación, destacó la obtención de un saldo comercial favorable, el cumplimiento en los portadores energéticos y en la generación de electricidad.
Con un crecimiento del 2,1 % del producto interno bruto (PIB), la economía de Cuba tuvo un desempeño favorable durante el primer semestre, a pesar de las tensiones, según expresó Adel Yzquierdo, vicepresidente del Consejo de Ministros y titular de Economía y Planificación.
Al informar sobre la ejecución del plan y el presupuesto hasta junio, el ministro destacó la obtención de un saldo comercial favorable, el cumplimiento en los portadores energéticos y en la generación de electricidad.
Igualmente hubo un crecimiento superior al 7% en las inversiones, aunque no se cumplió todo lo planificado; y creció la circulación mercantil, con un peso notable en la venta de materiales de la construcción que ya en esta fecha igualó el total comercializado en el 2011.
En correspondencia con la actualización del modelo económico, la fuerza de trabajo decreció en el sector estatal en un 7% y se incrementaron en un 35% los trabajadores no estatales o por cuenta propia.
Las finanzas externas del país mejoraron con un decrecimiento de las cuentas por cobrar vencidas y el estricto cumplimiento del pago de deudas bancarias, lo cual se reflejó en mayor credibilidad internacional.
Entre los problemas, se insistió en las dificultades con el transporte público y el incumplimiento de planes productivos de alimentos que conllevó la importación adicional de frijoles y leche.
Una importante reducción del déficit fiscal hasta el 1,7 % del PIB, fue el resultado más significativo en la liquidación del presupuesto del Estado del 2011, aspecto sobre el cual informó Lina Pedraza, ministra de Finanzas y Precios, y sobre el cual dictaminó la comisión de asuntos económicos del Parlamento.
En la valoración ante los diputados, Osvaldo Martínez, presidente de la mencionada comisión, resaltó que este déficit, muy inferior al 3,8% que preveía la ley del Presupuesto, es el más bajo desde la década de los años 90 y expresa un avance considerable, teniendo en cuenta que en el 2008 el mismo alcanzó el 6,9%.
No obstante, apuntó el incumplimiento en la recaudación fiscal en algunos tributos y conceptos, así como la persistencia de los subsidios por pérdidas a una parte del sistema empresarial, fundamentalmente de la Agricultura, el Azúcar, las industrias Básica y Ligera y los órganos locales del Poder Popular.
Fue considerable también la reducción en más de mil 150 millones de pesos de los gastos del sector presupuestado, “lo cual refleja la política sostenida por elevar el ahorro sin rebajar la cobertura fundamental de servicios”, indicó Martínez.
(tomado de Trabajadores)
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