Primero habrá que agradecerle a Fidel por su palabra cumplida, por ese “Volverán” al que nos aferramos los cubanos durante muchos años; pero lo más importante, la noticia que acapara titulares, es que los cinco compatriotas que tanto reclamamos están en tierra cubana.
René, Fernando, Antonio, Ramón y Gerardo vivieron el día más feliz de sus vidas, un 17 de diciembre que llegó para compensar una resistencia a prueba de encierros e injusticias, de privaciones y añoranzas.
El recibimiento de Raúl con los brazos abiertos, el abrazo de los Cinco; el beso de Adriana y Gerardo; el estrujón de Ramón y sus hijas; y las cabezas unidas de Antonio y su madre rubricaron, por fin, una felicidad a la que ahora no le falta ningún pedazo.
Tal vez por eso Tony, Gerardo y Ramón, los últimos en llegar a la Patria, conmovidos, pero felices como todo el pueblo cubano, después del abrazo a los suyos y dejaron espacio para agradecer a Fidel, a Raúl, a su pueblo que los reclamó incansablemente y al movimiento de solidaridad mundial.
Imágenes conmovedoras que disfrutamos los cubanos, una promesa cumplida, un día histórico que marcará pautas por varias razones, entre ellas el descongelamiento de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos, pero la primera es que nuestros Cinco Héroes están libres.
Junto a los que regresaron, los cubanos también agradecen:
a su Gobierno por conceder sin faltar a los principios, al pueblo cubano por su persistencia, a Su Santidad por sus esfuerzos mediadores y a Obama por el valiente gesto.
Escambray se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, así como los que no guarden relación con el tema en cuestión.