La capital de Cuba arriba este 16 de noviembre a 495 años de fundada con la vista puesta en un futuro de mayor relación con el mar y apertura a visitantes de múltiples geografías
Numerosas obras en ejecución contribuirán a ese propósito como la reparación del sistema de alcantarillado de la ciudad, que conduce los desechos hacia el mar, lejos del territorio nacional y, por tanto, se considera vital para el funcionamiento de la metrópoli.
A criterio de especialistas, otra acción indispensable es la rehabilitación de redes soterradas en el centro histórico de la capital, declarado Patrimonio Cultural en 1982 por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación la Ciencia y la Cultura (Unesco).
El proyecto, previsto para concluir en 2015, incluye el mejoramiento de las redes de electricidad, acueducto, gas y comunicaciones, que en muchos tramos precisa de una renovación tecnológica completa.
Según el coordinador del programa de redes soterradas de La Habana Vieja, Mario Delgado, este es un trabajo ejecutado calle a calle con el objetivo de mejorar los servicios a la población y favorecer el crecimiento y desarrollo general de esta zona en la que nació la gran urbe capitalina.
A partir del siglo XVI el puerto ofreció servicios a todo tipo de barcos y devino centro de la actividad económica portuaria del país hasta que las autoridades cubanas decidieron desplazar su infraestructura a la bahía del Mariel, a 45 kilómetros al oeste de La Habana, con mayor calado y amplitud.
La Oficina del Historiador de la Ciudad pretende colocar un paseo marítimo para que los caminantes puedan adentrarse a pie en parte de la bahía y restaurarán un embarcadero en busca de ampliar los servicios de cruce por mar a otros puntos de la urbe.
A partir de la ampliación del puerto del Mariel, la rada capitalina podría comenzar a reconvertirse e ir abriendo la ciudad al mar porque, en realidad, estaba de espaldas, comentó a Prensa Latina la directora de Plan Maestro para la revitalización integral de La Habana Vieja, Patricia Rodríguez.
La capacidad de relacionarse con el mar es una distinción de los habaneros y, de hecho, muchos símbolos aquí lo demuestran, como la estatua de Cristo, que recibe a los visitantes a la entrada de la bahía; y la Giraldilla, un icono de la ciudad proveniente de una célebre historia de amor.
No sería comprensible lo que somos hoy sin tener idea de lo que fuimos ayer, recuerda a menudo el historiador de La Habana, Eusebio Leal.
En reciente encuentro con la prensa, Leal agradeció el apoyo de la Unión Europea y de la Unesco en obras cuya reparación demandan múltiples recursos y años de labores para devolver cuerpo y esplendor.
De acuerdo con el Historiador, el esfuerzo valeroso por La Habana no puede ser solo de pintar fachada.
Emplazamientos importantes rescatados este año fueron el Teatro Martí, cuna del género bufo en Cuba, el mariposario de la Quinta de los Molinos, el Bodegón del Queso y el antiguo Almacén de la Madera y el Tabaco, convertido ahora en una cervecería artesanal, entre otros sitios restaurados.
Pese a varios planes en ejecución, La Habana, conocida en época colonial como La llave del Golfo, necesita aún de muchos proyectos y reunión de voluntades para recobrar parte de un encanto que inspiró a poetas, músicos y pintores de distintas generaciones.
Acho Cuba lindissima e admiro sua historia!
Meu maior sonho e’ : conhecer este pais e o homem q de deu ao seu povo dignidade qdo tirou ele do julgo americano /Fidel Castro .Viva Fidel
Felicito a la capital de todos los cubanos como otros muchos qué anticipadamente la colmaron de satisfacciones y alegría con la esperada elección qué está vistiera de largo con el Hall de la fama en sus predios .Lázaro Izquierdo Martínez