Los presidentes de Cuba, Raúl Castro, y de Argentina, Cristina Fernández, asisten hoy a la misa que oficiará el papa Francisco en la capitalina Plaza de la Revolución, bellamente engalanada para la ocasión.
El emblemático escenario de relevantes concentraciones y desfiles en apoyo al proceso revolucionario cubano iniciado en enero de 1959, acoge también a miles de creyentes o no, así como a numerosos peregrinos extranjeros que viajaron a La Habana para escuchar la homilía de Su Santidad, el argentino Jorge Mario Bergoglio.
Antes de llegar al altar, Francisco saludó a los presentes en un recorrido por los espacios dejados entre las cinco secciones en que se dividió la inmensa plazoleta para albergar a los asistentes.
Esta constiuye la tercera ocasión en que un Obispo de Roma oficia una misa en la Plaza de la Revolución en los últimos 17 años. La primera fue en enero de 1998, cuando lo hizo Su Santidad Juan Pablo II y la segunda en marzo de 2012, con el papa Benedicto XVI.
Desde hace unos meses, la Plaza de la Revolución es acondicionada para la misa campal de este domingo y el altar está ubicado en medio de las principales edificaciones que rodean la inmensa plazoleta preferida por los cubanos para expresar su respaldo al proceso revolucionario iniciado en enero de 1959.
Entre esos relevantes acontecimientos sobresalen la Primera Declaración de La Habana, la proclamación de Cuba como territorio libre de analfabetismo y los desfiles por el Día Internacional de los Trabajadores, cada 1 de Mayo.
El acompañamiento musical de la misa estará a cargo de la Orquesta de la Universidad de las Artes, reforzada con estudiantes de la Escuela Nacional de Arte, algunos profesores y miembros de la Orquesta Sinfónica Nacional.
El maestro Ulises Hernández, director del Lyceum Mozartiano, explicó recientemente a la presa que lo novedoso para la Orquesta es que trabajará con importantísimas agrupaciones corales cubanas como Exaudi, la Scholla Cantorum Coralina, el Coro Nacional y agrupaciones de diferentes iglesias y una infantil.
Precisó que «el repertorio ha sido seleccionado por la propia Iglesia y responde a la liturgia de la misa, con sus respectivas partes: muchos de estos cantos, arreglados para orquesta sinfónica y coro, son utilizados y conocidos por los feligreses y han sido premiados de la cubanía que nos representa musicalmente sonará a Cuba, indiscutiblemente».
Se trata de un evento irrepetible: el Papa, que es una figura de una gran trascendencia, estará en Cuba, y para los cubanos, creyentes o no, constituye un acontecimiento histórico, aseveró Hernández.
La agenda de Su Santidad para esta jornada incluye además una visita de cortesía al presidente cubano, Raúl Castro, de donde partirá una hora después hacia la Catedral de La Habana, en el casco histórico de la ciudad, para participar en una plegaria de vísperas con sacerdotes, religiosos y seminaristas.
El último acto oficial de este domingo del papa Francisco consistirá en un encuentro con jóvenes cubanos en el Centro Cultural Padre Félix Varela, también en el casco histórico de esta ciudad.
Mañana, el Sumo Pontífice viajará a la nororiental provincia de Holguín, segunda escala de su visita a este país y ese mismo día se trasladará a la suroriental provincia de Santiago de Cuba, desde donde partirá el martes 22 hacia Estados Unidos, segunda etapa de su décimo viaje al exterior.
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