Situación epidemiológica a la mira de parlamentarios cubanos

Roberto Morales Ojeda, miembro del Buró Político del Partido Comunista de Cuba y titular del Ministerio de Salud Pública (MINSAP), aseguró que al cierre de junio la situación epidemiológica del país tiene un comportamiento favorable comparado con similares etapas precedentes

Durante su intervención en la Comisión de Salud y Deportes del Parlamento, reunida con antelación al IX Periodo de Sesiones de la Octava Legislatura que se celebrará el viernes, Morales Ojeda enfatizó que sin embargo existen vulnerabilidades en algunos territorios para enfrentar las arbovirosis.
Alertó que estas enfermedades son más propensas a propagarse en la presente etapa, con el incremento de las temperaturas y las lluvias.
Por tal motivo, instó a redoblar los esfuerzos en el control del mosquito Aedes aegypti, agente transmisor del dengue, el chikungunya y el zika, entre otras enfermedades.
El titular del MINSAP aclaró que en lo que va de 2017 en Cuba no ha habido casos de chikungunya ni fiebre amarilla, aunque la reaparición e incremento en varias zonas de América Latina y África disparan las alarmas en el territorio nacional.
Recalcó que al cerrar el primer semestre la mayor de las Antillas concluyó sin transmisión de dengue, aunque sí existe en la ciudad de Holguín, así como también en Cienfuegos de forma localizada y en algunas áreas de La Habana.
Mientras el zika, esparcido por casi todo el mundo desde su aparición en Brasil en 2015, está presente en localidades de Holguín y Guantánamo.
Morales Ojeda recalcó que por tal motivo la etapa intensiva para el control de la transmisión se desarrollará hasta el 20 de julio, con el propósito de erradicar la infestación en esos territorios.
Durante esta jornada, y de conjunto con la Comisión de Defensa Nacional, los legislativos conocieron que la etapa intensiva se extiende a cinco provincias con 16 municipios, de 33 que había en junio último.
El ministro alertó que hoy más del 70 por ciento de los focos de mosquitos están dentro de la vivienda, fundamentalmente en los depósitos de agua, y señaló que la participación comunitaria organizada todavía es insuficiente en algunos lugares.
La proliferación de la enfermedad está asociada a la calidad del control del vector trasmisor, señaló, al tiempo que recabó mayor percepción de riesgo para bajar los niveles de infestación a menos de 0.05.
Si resolvemos esto podemos pasar a la etapa de sostenibilidad de la campaña, enfatizó Morales Ojeda.
Igualmente reconoció el apoyo de las Fuerzas Armadas Revolucionarias en esta etapa intensiva iniciada en mayo, y que ha contribuido a disminuir los índices de infestación y a más seguridad para el pueblo.
Pedro Esquivel, diputado de la Comisión de Defensa Nacional por El Cotorro, consideró que no se debe renunciar a la prevención desde los hogares, aun cuando el país destina millonarios recursos para estas campañas.
Hay que caminar dentro del barrio en el combate de todos, hay que ser más enérgicos en hacer cumplir los decretos leyes, pues cuando te tocan el bolsillo, la cabeza cambia, remarcó.
Otros legislativos de los dos grupos permanentes de trabajo del Parlamento coincidieron que entre los principales problemas están la calidad del focal y la sostenibilidad.
Anteriormente, conocieron un informe de la Defensa Civil dirigido a la reducción de riesgos de desastres.
El General de División Ramón Pardo Guerra, jefe del Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil, advirtió sobre los esfuerzos del país para el desarrollo de estas campañas, e insistió en que la prevención debe ser de forma permanente.
Ante la actual etapa de riesgos tenemos que trabajar, tomar medidas y garantizar los recursos, hacer un esfuerzo conjunto con el MINSAP y otras instituciones en aras de evitar la epidemia, significó.