Más de 3 000 test rápidos para detectar la presencia de la COVID-19 en determinados grupos de la población se han realizado en Sancti Spíritus desde que el pasado 1 de abril se ampliara la aplicación de este tipo de pruebas en Cuba.
De acuerdo con el doctor Jassiel López Medina, jefe del Programa de Tuberculosis y de Infecciones Respiratorias Agudas en la provincia, la prueba se ha practicado al ciento por ciento de los adultos mayores que hoy permanecen en los hogares de ancianos y casas de abuelos del territorio, teniendo en cuenta que es uno de los grupos más vulnerables a la enfermedad.
López Medina explicó que la prueba se ha aplicado a los casos que han transitado y transitan por los diferentes centros de aislamiento y de cuarentena para viajeros habilitados en la provincia, y se adiciona el personal de salud que trabaja en el combate contra la COVID-19.
El galeno agregó que dicho examen se realiza con una muestra de sangre y en menos de 30 minutos se determina si la persona está infectada o no, y en caso de ser positiva se practica la prueba de biología molecular en tiempo real, también conocida como PCR, para la confirmación de la afección.
Según el también especialista en Higiene y Epidemiología, los test permiten detectar un mayor número de personas que puedan estar infectadas en el territorio y, en consecuencia, facilitan la pronta actuación para disminuir el riesgo de transmisión de la enfermedad.
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