Daños en cubiertas de 10 viviendas y la escuela primaria Esteban Hernández figuran entre las afectaciones preliminares ocasionadas por la tormenta local severa que afectó en la tarde noche de ayer a la comunidad de San Pedro, a poco más de 30 kilómetros de Trinidad.
Después de activarse, el Consejo de Defensa Municipal y las diferentes comisiones de trabajo recorrieron las áreas afectadas para constatar que no se reportan heridos, aunque al intercambiar con los vecinos conocieron la angustia vivida la víspera ante los fuertes vientos y las descargas eléctricas asociados a este fenómeno.
De acuerdo con Grisel Sesmonde, viceintendente del Gobierno al frente de las actividades de construcción e inversiones, se contabilizan hasta este momento nueve derrumbes parciales y uno total de techo en igual número de viviendas, pero la cifra puede aumentar en la medida en que se llegue otros asentamientos cercanos.
La funcionaria comentó a Escambray que, minutos después del tornado, los vecinos se sumaron a las labores de recuperación de daños menores que sufrieron los techos de teja francesa, además de la limpieza de las calles y la recogida de escombros.
Por su parte, Maira Fundora, directora de Educación en el sureño municipio, confirmó que las mayores afectaciones se reportan en el centro educacional, con varios de sus locales sin cubierta. “En el primer bloque, la dirección y el aula de primer grado, toda el aula izquierda del segundo bloque, el pasillo central y la mitad del comedor”, acotó.
Según la fuente, no sufrieron daños los recursos audiovisuales ni la base material de estudio, los cuales se encontraban resguardados en el almacén, una de las áreas recuperadas gracias a los trabajaos que ejecuta la Oficina del Conservador de Trinidad y el Valle de los Ingenios en ese plantel.
Resaltó además la respuesta del colectivo de trabajadores que se encuentran en la escuela en labores de limpieza y de organización del ciclo docente a reiniciarse la semana próxima en otros locales de esta comunidad, que otra vez se levantará para unir los brazos, borrar lo feo y ayudar a los damnificados.
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