Sancti Spíritus también sobrepasó el compromiso de entrega de frijoles con destino al MINCIN (1 400 toneladas), un frente en el que igualmente decide el municipio de Yaguajay.
Por Juan Antonio Borrego Díaz
Cuando los aguaceros interminables de octubre y noviembre amenazaron con arruinar la producción de maíz ya recogida, los guajiros de Yaguajay regaron los granos en cuanta carretera tiene la zona, tendieron sus mantas en azoteas y portales, y algunos más precavidos, como Marcial Díaz, hasta conectaron un ventilador frente a los sacos con mayor humedad.
Los cosecheros de Jarahueca cuentan que la combinación de lluvia a toda hora y días nublados también cayó durante semanas sobre las plantaciones de frijoles, algunas de las cuales se perdieron con el exceso de agua y la invasión de las plagas.
En la escaramuza meteorológica varias toneladas se perdieron, pero aún así el granero espirituano, como se le conoce a la zona, sacó la cara por la provincia, que en un año complicado logra cumplir sus compromisos de entrega de maíz para la producción porcina —tiene el tercer plan más alto del país después de Santiago de Cuba y Matanzas— y de frijoles para el Ministerio de Comercio Interior (MINCIN), ambos frentes en extremo estratégicos para la economía nacional.
Los especialistas refieren que en muchas de las áreas destinadas a maíz y frijol, tanto en Yaguajay como en el resto de la provincia espirituana (también sobresalen los municipios de Cabaiguán, Jatibonico y Taguasco), se obtienen altos rendimientos en condiciones de secano, lo que obviamente ilustra la existencia de consagración y, por supuesto, una elevada cultura entre los productores.
En relación con la producción de maíz para la alimentación animal, a Yaguajay corresponde más del 60 % del plan espirituano (2 850 toneladas de las 4 500 programadas a nivel provincial), con incidencia directa de las empresas Obdulio Morales, Valle del Caonao y Pecuaria Venegas.
Este aporte, además de propiciar el cumplimiento de Sancti Spíritus, aseguró un crecimiento a nivel provincial en relación con lo entregado el pasado año que ronda las 1 000 toneladas, según explicó a Escambray Leonel Valdivia Hernández, a cargo de los Cultivos Varios en la delegación territorial del Ministerio de la Agricultura.
De acuerdo con la propia fuente, Sancti Spíritus también sobrepasó el compromiso de entrega de frijoles con destino al MINCIN (1 400 toneladas), un frente en el que igualmente decide el municipio de Yaguajay, en particular las zonas campesinas ubicadas al sur de este territorio, donde cooperativas como la Juan Darias, incluso, consiguen varias cosechas de la legumbre al año.
Los resultados de este año son mejores de los del anterior, lo cual, según productores y directivos, tiene que ver con el control ejercido sobre el destino de la producción, el establecimiento de una mejor contratación entre las partes y un aseguramiento material superior.
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