En el territorio existen condiciones para enfrentar una cosecha superior en organización, donde se reduzcan los llamados picos o maratones, que a la postre resultan dañinos para cualquier proceso.
Con mayor aseguramiento de insumos tanto para la maquinaria agrícola como para la industria procesadora, los arroceros espirituanos iniciaron la cosecha correspondiente a la campaña 2011-2012, en la que aspiran a recolectar unas 116 000 toneladas del grano, cifra ligeramente superior a la del año precedente, considerado el segundo más productivo en la historia de esta provincia.
La recolección comenzó por las Unidades Básicas de Producción Cooperativa (UBPC) Sur del Jíbaro y Mapos, y de acuerdo con la programación de corte en los días sucesivos se irán incorporando otras de manera paulatina en dependencia del estado de maduración de los campos.
Según comentó a Escambray el ingeniero Ricardo Hernández Rodríguez, director de Mecanización y Logística del CAI Arrocero Sur del Jíbaro, en el territorio existen condiciones para enfrentar una cosecha superior en organización, donde se reduzcan los llamados picos o maratones, que a la postre resultan dañinos para cualquier proceso.
Al decir de la propia fuente, el abasto de partes, piezas y accesorios, especialmente de rodamientos y correas, y el empeño de los trabajadores de los seis puntos de reparación con que cuenta el CAI –en sus cinco UBPC y en el Taller Central- significan beneficios directos para el parque de cosechadoras, ascendente a 43 máquinas, 31 del complejo y 12 del sector cooperativo y campesino.
El arribo de piezas se torna particularmente salvador para una veintena de cosechadoras de la llamada Serie L, las más envejecidas, que con la actual rehabilitación mejoran considerablemente su estado técnico y, por ende, sus rendimientos en la recogida del grano.
El esquema de reparación de las cosechadoras contempla la salida de un lote de 10 máquinas en el mes de abril, cuando se registra una producción limitada de arroz, otras 18 en mayo y el resto a principios de junio, etapa en la que se espera uno de los momentos de mayor demanda de corte.
La infraestructura industrial, integrada por nueve secaderos y cinco molinos, igualmente se ha beneficiado con inversiones dirigidas a los sistemas de proceso, almacenamiento y en especial a los 10 silos refrigerados con que cuenta la entidad.
De manera simultánea con la recuperación de la maquinaria agrícola y el mejoramiento de la industria, Sur del Jíbaro ha continuado los trabajos de limpieza y rescate de canales, viales, obras de fábrica y sistemas de riego, afectados durante décadas por el deterioro y la falta de mantenimiento.
Veo los grandes pasos de avances con respecto al pasado de los arroceros de SANCTI SPIRITUS todas las normas y medidas a tomar son excelentes pues hombre maquinarias necesitan adecuadamente mantenimiento y el trabajador un adecuado equipo de protecciones y alimentos razonables pues largas horas de labores en el campo es mortal de un lado el sol y del otro el agotamiento por hacer trabajos duros yo he visto la siembra del arroz en posturas y luego el trasplante crean yo soy ahora medio guagiro y son dificiles las labores del campesino y no muchos le comprenden pues tienen tremenda voluntad y amor a sus labores aparte el sacrificio la voluntad y el sentido de pertenencia que estos bravos hombres y mujeres agropecuarios espirituanos hacen hay que quitarse el sombrero al ver con que laboriosidad los arroceros atienden las parcelas. Lazaro