Un total de 53 407 venezolanos han sido atendidos por diferentes patologías en Cuba en los 12 años de existencia del convenio de salud entre la nación caribeña y Venezuela.
Entre los primeros pasos del gobierno del presidente Hugo Chávez estuvo la firma de este acuerdo de cooperación en el sector de la salud, el 30 de octubre del 2000, para garantizar la atención de enfermedades para cuya solución no existían centros especializados en esta nación suramericana, afirmó este martes la ministra del sector, Eugenia Sader. entrevistada por Venezolana de Televisión.
Sader resaltó que esta atención se brinda de manera totalmente gratuita, en la que el paciente solo debe poner su voluntad.
«El convenio ha dado esperanzas, confianza» y la persona no tiene que preocuparse, pues el costo lo asume el gobierno cubano, solidaridad que extiende a ciudadanos de otros países, aseveró la ministra.
Asimismo destacó la excelencia del centro cubano de salud La Pradera, donde los pacientes y sus acompañantes reciben una atención especializada, «solidaria, eficiente y humanitaria» y, en el caso de los niños, se les garantiza también la educación.
De esta experiencia dió fe Ana Rivero, abuela de Ana María González, una niña venezolana de 11 años de edad que recibió en Cuba atención a su discapacidad por cerca de dos años, y hoy continúa en su país la rehabilitación, además de cursar sexto grado.
«Ese programa del convenio para nosotros significó mucho porque a través de él nos devolvió la esperanza y conseguimos lo que estábamos buscando. Fue de primera y nadie nos cobró nada», manifestó Rivero.
Entre las patologías que atiende el convenio están las enfermedades óseas y articulares, de la piel, tumores, endocrinas, del sistema circulatorio, entre otras, y el proceso de rehabilitación.
Los beneficios de este programa se han extendido con el desarrollo en la geografía venezolana de la Misión Barrio Adentro, Misión Milagro, formación de médicos y la construcción de un sistema nacional de salud pública.
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