No tuvo que madurar el proceso emprendido por los cubanos tras el triunfo de 1959 para que la maquinaria del vecino del Norte pusiera en práctica su variado arsenal de métodos para subvertir el orden. Una vez que Estados Unidos comprendió que la Revolución no abandonaría su camino, ni renunciaría a sus ideales por muchas presiones que sobre ella se ejerciera, emprendieron la cadena de acciones económicas dentro de la que el bloqueo, ese mal que todavía nos arremete, resultó su principal sustento.
Pero no fue el único. Sin perder tiempo reclutaron mercenarios y los entrenaron para actos de sabotaje y acciones militares.
La Agencia Central de Inteligencia (CIA), apoyada en elementos reaccionarios, se dio a la tarea de organizar grupos contrarrevolucionarios para promover la subversión. Cientos de infiltrados llegaron a costas cubanas.
El Escambray, un macizo montañoso localizado en el centro de Cuba, también formaba parte del plan. Utilizando elementos contrarrevolucionarios, antiguos agentes de la tiranía del dictador Fulgencio Batista y desafectos de toda índole, el imperialismo creó numerosas bandas armadas, a las que el gobierno estadounidense les facilitó armamento y logística de forma abierta y descarada.
A fines de noviembre de 1959, fuerzas revolucionarias capturaron al primer grupo de alzados que operó en esos parajes. Sus miembros procedían de la organización contrarrevolucionaria La Rosa Blanca, quienes habían visto truncado su plan inicial de brindar apoyo a la invasión que sustentada por el sátrapa dominicano Rafael Leónidas Trujillo fue abortada en el aeropuerto de Trinidad en agosto de ese año con Fidel al frente.
En 1960 ocurrieron numerosos alzamientos. Entre los cabecillas se encontraban Evelio Duque, Osvaldo Ramírez, Silesio Walsh, Joaquín Bembirre, Reemberto Ramírez y Plinio Prieto. A fines de ese propio año se inició lo que se conoce como la Limpia del Escambray. Más de 60 mil milicianos fueron movilizados para las operaciones.
Grandes cercos, dirigidos por oficiales del Ejército Rebelde, propinaron un duro golpe a los alzados. Los combatientes revolucionarios obligaron a los bandidos a entregarse o intentar romper los cercos. Muchos cayeron prisioneros, otros murieron en combate y unos pocos lograron salir del país, mientras unos 150 quedaron dispersos por la zona.
Así era de desalentadora la situación para la contrarrevolución cuando el imperialismo puso en práctica la otra alternativa: la invasión indirecta por la Bahía de Cochinos. Al ver aplastado su intento de invasión, el enemigo de nuevo prestó importancia al bandidaje, y reorganizó el reducido grupo que quedaba en el Escambray, al que brindó todo tipo de ayuda.
Los principales jefes de bandas se propusieron aumentar la cantidad de guerrillas y disminuir el número de integrantes. Crearon una nueva estructura basada en comandancias, capitanías y tenencias. La comandancia general fue asignada a Osvaldo Ramírez, quien ordenó pasar a la acción después de situadas las bandas en sus zonas de operaciones. Entonces, como respuesta, se creó la Región Militar Especial del Escambray, con una organización que respondía a la ubicación de los focos de alzados.
El 17 de abril fue capturado Osvaldo Ramírez en la finca Aromas de Velázquez. Tres meses después fue designado Tomás San Gil jefe de los bandidos, y Emilio Carretero, jefe del Estado Mayor. Dirigían 14 bandas con un aproximado de 300 bandidos. En esta etapa se creó la sección Lucha Contra Bandidos (LCB), que aplicó una táctica de gran efectividad.
El primero de marzo de 1963 cayó muerto San Gil. Carretero asumió la jefatura de los bandidos. El bandidaje entró entonces en una etapa decadente y, a la vez, de mayor actividad.
Dos medidas del Gobierno Revolucionario propinaron un duro golpe al bandidaje: el traslado a otras zonas de los colaboradores de los alzados y la Segunda Ley de Reforma Agraria, que eliminó la burguesía rural, la cual en el Escambray constituía una importante ayuda económica para las bandas.
El 28 de marzo de 1964 fue capturado Emilio Carretero gracias a la labor de Alberto Delgado, combatiente de la Seguridad del Estado conocido como el Hombre de Maisinicú. Las ininterrumpidas operaciones de la LCB y de las fuerzas de inteligencia no le dieron tregua a los bandidos. A finales de 1965, Luis Vargas y José Rebozo eran los únicos alzados del Escambray. El primero de diciembre Vargas fue detenido. Por esa misma fecha, Rebozo es capturado, con lo cual queda cumplido uno de los objetivos de la Limpia del Escambray. Doscientos noventa y cinco combatientes perdieron la vida y 2 mil cinco contrarrevolucionarios fueron capturados o muertos.
El macizo montañoso del centro de la Isla fue escenario de otra derrota imperialista. El Escambray se convirtió, entonces, en una victoria de pueblo
creo que es un tema interesante sobre todo pues desde niña mi papá me contaba todas esas anecdotas de la lucha contra bandidos y del escambray me considero privilegiada en este sentido aunque hoy es una persona con las secuelas de la guerra por un tiro en la cabeza eso lo hace el mas alegre y dicharachero siempre que logro acceder a libros sobre el tema se los compro para que los lea , de sus anecdotas conoci sobre tomassevich y otro dirigentes de la limpia del escambray
Estas paginas gloriosas de nuestra historia se necesitan divulgar a diario pues el enemigo dentro y fuera de nuestro pais debe saber que cuando con sangre se escribe la historia ,con sudor se edifica el futuro , ya la sangre esta dada , demos hoy el sudor y forjemos el futuro y que sirva de escarmiento a algunos que hoy en dia todavia piensan que esta Revolucion sera destruida pues estan equivocados sepan que ya la semilla esta sembrada y bien abonada y aporcada y nada ni nadie podra abasallarla , pues somos forjados en el fuego de una herancia Revolucionaria y eso es algo muy Importante Al Pasado jamas Regresaremos .
Vivan Fidel y Raul por Siempre
Viva la Revolucion
Vvian los Heroes del pasado que hoy se regeneran dia a dia en este pueblo luchador y forjador de nuevas Ideas
Socialismo o Muerte
Patria o Muerte Venceremos.
Los bandidos como sus patrocinadores no contaron con varios factores en su contra que fueron que el propio COMANDANTE EN JEFE con su importante presencia iba ser la chispa que iba inspirar a milicianos y pueblo en general para aplastar a los asalariados bandidos de la CIA en el ESCAMBRAY pues estos como mala hierba necesitaban unas buenas combinaciones gue a la postre pudieron ser arrancadas de raices para siempre y de esa manera el AGUILA Y SUS PICHONES MURIERON SIN PODER VOLAR EN EL ESCAMBRAY. Lazaro izquierdo