El líder de la nación del Islam de Estados Unidos, el ministro Louis Farrakhan, afirmó este martes en La Habana que Cuba es la vanguardia del cambio universal, una semilla que Estados Unidos desea aplastar.
El bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Washington desde la década del 60 del siglo pasado es una abierta manifestación de guerra, declaró Farrakhan durante un encuentro con una representación de los familiares de los cinco antiterroristas cubanos detenidos en el país norteño desde 1998.
La verdad es la primera baja en esta guerra y se ponen en prácticas las mentiras, subrayó el líder religioso en la sede del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos.
La Revolución se convirtió en una semilla para combatir las injusticias y para Estados Unidos está debe ser aplastada, recalcó el líder espiritual.
El odio anticubano -nacido en aquellos que marcharon del país cuando se tomaron importantes medidas populares como la Reforma Agraria a principios del proceso de cambios -produce sufrimientos al pueblo caribeño, explicó Farrakhan.
Ellos tienen fuerza e influencias y puede controlar hasta miembros del Congreso, de esa forma mueven los hilos de la política contra la mayor de las Antillas, aseveró.
Estados Unidos está en un error cuando comete estas injusticias, y nosotros estamos en el deber de contactar con organizaciones solidarias y buscar las rutas posibles para lucha contra el bloqueo económico, dijo el religioso.
En referencia a los cinco antiterroristas cubanos detenidos en Estados Unidos desde 1998, expresó por los Cinco podemos hacer más de lo que hemos hecho hasta ahora.
Tras siete años regreso a Cuba y veo que ellos continúan siendo blanco de una gran injusticia por parte del gobierno norteamericano, subrayó Farrakhan.
Antonio Guerrero, Fernando González, Ramón Labañino, René González y Gerardo Hernández fueron condenados a severas penas por informar sobre planes de acciones violentas contra Cuba fraguados por grupos terroristas basados en la Florida.
La injusticia es parte del sistema político estadounidense, y el odio organizado es más efectivo que el amor desorganizado, de ahí que debemos unir fuerzas en este empeño, y aunque se conozca los detalles del caso en muchas partes del mundo, es necesario divulgarlo más en territorio norteamericano.
A nuestro regreso difundiremos los videos de nuestra visita a la mayor de las Antillas, y daremos a conocer información real sobre Cuba, porque estoy convencido que nuestra causa no está perdida y obtendremos la victoria.
«Después de la oscuridad viene el amanecer de un nuevo día», sentenció el líder religioso.
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