Demandan eficiencia económica en ejercicio popular Meteoro

El General de División Ramón Pardo Guerra,  jefe del Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil (DC) de Cuba, reclamó este sábado en La Habana que la eficiencia y la racionalidad deben caracterizar la realización del ejercicio popular Meteoro en casos de desastres.
La actualización del modelo económico del país incide en la organización de las acciones para la reducción de catástrofes, afirmó Pardo Guerra al hablar en la sede de su institución ante oficiales de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, del Ministerio del Interior y de representantes de otros organismos.
Llamó la atención sobre la necesidad de que territorios y
sectores de la economía precisen sus actuaciones para enfrentar los efectos de la sequía, por los pronósticos de poca lluvia para los próximos meses.
Meteoro comenzó este sábado su primer día a fin de preparar a la Isla en el enfrentamiento a probables fenómenos hidro meteorológicos durante la temporada ciclónica, que empieza el primero de junio y se extiende hasta el 30 de noviembre próximo.
La prevención y reducción de pérdidas humanas y materiales por huracanes, sismos, sequía, incendios forestales, enfermedades exóticas y otros eventos, constituyen prioridades de los órganos de trabajo de los Consejos de Defensa (CD) Nacional, Provinciales, Municipales y de Zona, y otro.
Mercedes López Acea, miembro del Buró Político del Partido Comunista de Cuba y primera secretaria de la organzación en La Habana, asistió en compaía de varios dirigentes a la sesión del CD de la capital.
Marta Hernández Romero, su vicepresidenta, comentó a la AIN que uno de los objetivos esenciales de la jornada es el estudio de las vulnerabilidades existentes, en particular en presencia de ciclones y probables inundaciones costeras.
Añadió que se ocupan también de minimizar las consecuencias de la sequía y de garantizar las inversiones en obras para contrarrestar sus secuelas, el funcionamiento integral de los puestos de dirección y atención jerarquizada al fondo habitacional capitalino ante situaciones de derrumbes y atención a las familias más necesitadas.
Una experiencia de tipo es aplicada en la nación desde 1986 y su resultados son reconocidos internacionalmente por la baja tasa de mortalidad por desastres naturales.