Escambray Periódico de Sancti Spíritus
Desde el arribo de Camilo y el Che a esta región central de Cuba, en menos de tres meses de accionar guerrillero, una provincia completa, Las Villas, ya es territorio libre.
Diciembre de 1958. En la antigua provincia de Las Villas, como en la de Oriente, los acontecimientos se precipitan a un ritmo vertiginoso. La guerra liberadora del Ejército Rebelde liderada por Fidel Castro se desborda de sus cauces montañosos e inunda los llanos de la isla alcanzando a poblados y ciudades en medio del entusiasmo ardoroso de las masas.
La idea de Fidel de llevar las operaciones a los confines centrales y occidentales del país trajo esta vez aún más rápidos y jugosos frutos, pues la llegada a territorio villareño de las columnas invasoras de los comandantes Camilo Cienfuegos y Ernesto Che Guevara a inicios de octubre de 1958 dio un vuelco radical a la dinámica de la guerra, que ya duraba 22 meses.
SIN PERDER UN MOMENTO
Recién llegado el Che al Escambray expresó su voluntad de iniciar lo antes posible acciones contra el régimen. De ahí su ataque al cuartel de Güinía de Miranda el 26 de octubre, apenas transcurridos 10 días de su arribo a la zona.
Le seguirían el asalto a Caracusey por el Directorio Revolucionario 13 de Marzo y las acciones por el control de las vías de comunicación. El primer objetivo materializado por las huestes insurrectas fue hacer fracasar la farsa electoral efectuada por el régimen el 3 de noviembre de 1958.
Junto con la redoblada actividad del Frente Norte, liderado por Camilo, las tropas del Che incrementan su accionar en las estribaciones del lomerío de Guamuhaya, para lo cual adelantan su Comandancia hacia el poblado de El Pedrero.
A inicios de diciembre, el enemigo lanza una ofensiva contra esa localidad con más de 1 000 soldados y apoyo aéreo, artillero y de blindados desde tres direcciones convergentes, pero las fuerzas revolucionarias hacen fracasar los sucesivos intentos de los soldados por avanzar y ya el 5 se ven obligados a retirarse con sensibles pérdidas y sin alcanzar su propósito.
Así, las tropas del régimen no pudieron impedir la firma en ese enclave guerrillero, el primero de diciembre, del conocido Pacto de El Pedrero, que sellaba la unidad combativa y política del Movimiento 26 de Julio y el Directorio Revolucionario 13 de Marzo, acuerdo al que poco después se sumaría el Partido Socialista Popular.
LA OFENSIVA FINAL
Ya el 15 de diciembre efectivos de la Columna No. 8 al mando del Che derriban el puente sobre el río Falcón en la Carretera Central, dejando la isla prácticamente cortada en dos. En la madrugada del 16 entran los rebeldes en Fomento e inician la lucha por esa población, cuyo cuartel se rinde el 18. El 20, pelotones rebeldes ocupan Banao, mientras otros avanzan en pos de Guasimal y Tunas de Zaza. El 21 es liberado Guayos y el 22, Cabaiguán, luego de dos días de escaramuzas y combates.
El 23 de diciembre tropas del Movimiento 26 de Julio comandadas por el capitán Erasmo Rodríguez (Armando Acosta) y del Directorio, bajo el mando del comandante Julio Pérez Castillo, hacen huir a los soldados que ocupaban la sede del Escuadrón 38 de la Guardia Rural en Sancti Spíritus, con lo que de momento la villa espirituana se convierte en la mayor ciudad del país en manos de las huestes rebeldes.
El 28, destacamentos del Directorio entran en Trinidad y otros del “26” en Jatibonico, que para el 30 y el 31 de diciembre, respectivamente, ya son territorios libres. El 17, las tropas de Camilo ocupan Meneses, el 20 liberan Mayajigua y ese propio día penetran en Yaguajay e inician los combates contra posiciones del régimen en la localidad y contra el cuartel, que capitula en la tarde del día final del año.
APOTEOSIS Y VICTORIA
Desde el arribo de Camilo y el Che a esta región central de Cuba, en menos de tres meses de accionar guerrillero, una provincia completa, Las Villas, ya es territorio libre, lo que junto con las resonantes victorias del Ejército Rebelde en la antigua provincia de Oriente, bajo el mando del Comandante en Jefe Fidel Castro, precipita el desplome vergonzoso del régimen.
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Escambray / ISSN 9664-1277
Yo estaba en S Spiritus en esos dias, y recuerdo el entierro acompañado de la Banda Municipal de Musica el 25 o 26 de Diciembre de un combatiente caido en Trinidad, de apellido Valdes. Los aviones B-26 ametrallaron varias veces el centro de la ciudad, y el cuartel de la Guardia Rural fue practicamente demolido para declarar a S Spiritus «ciudad abierta» e impedir la amenaza de un bombardeo. Fueron destruidos por los combatientes el ouente de la Carretera Central situado en La Trinchera, y el que estaba sobre el rio Zaza, en la salida de S Spiritus hacia Jatibonico.