La espirituana Lisandra Rodríguez Mendoza cautiva por estos días a aficionados y especialistas en el capitalino velódromo Reynaldo Paseiro, sede de las competencias de ciclismo en la presente cita escolar.
Tras lograr plata y bronce en la edición anterior, incrementó su preparación de la mano del técnico Jorge Luis Rojas y ya este año celebra el metal dorado en los 500 metros contrarreloj, así como el segundo escaño en habilidad y destreza y el tercer puesto en la velocidad.
«Estoy muy motivada y por eso he entrenado mucho», dice la yayabera, que compite ahora en la nueva categoría 13-15 y cursa estudios en la EIDE Lino Salabarría.
Con tan solo tres años de experiencia, Lisandra ratifica su amor por una disciplina que considera «muy hermosa» y en la que se ha propuesto sumar nuevos triunfos.
«Siempre me gustó el ciclismo, veía algunas competencias por televisión y así me fui embullando. Las actuaciones de Yoanka González, Yumari González y Lisandra Guerra me estimularon mucho», explica.
«Soy muy activa, disfruto pedalear y hasta los entrenamientos me motivan, aunque son muy fuertes», confiesa.
Con excelente promedio académico, la novel asegura que este año viene por más preseas de oro, aunque subraya que en la escuela ha aprendido a no subestimar a las rivales.
Amante de leer y escuchar música, se sonroja cuando escucha al preparador Jorge Luis hablar de las enormes perspectivas de su pupila. Juntos sonríen, conscientes de que este es el punto de inicio de una posible gran carrera. Quizá en el futuro cumpla el sueño de verse en unos Juegos Olímpicos y recuerde su paso por la fiesta escolar.
«Por supuesto que llegaré a representar a Cuba, es uno de mis grandes objetivos», precisa Lisandra.
(Tomado de Juventud Rebelde)
Escambray se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, así como los que no guarden relación con el tema en cuestión.