El traslado de Tony desde la cárcel de Florence a la de Oklahoma, y de allí a la de Marianna, en la Florida, lo sorprende plenamente inmerso en su obra poética y pictórica. Su calidad lírica y humana lo ha puesto en contacto con el gran poeta brasileño Thiago de Mello.
Antonio “Tony” Guerrero Rodríguez, uno de nuestros Cinco Héroes presos en los Estados Unidos por luchar contra el terrorismo, no se aburre. Al contrario, aparte de recibir y enviar correspondencia, está plenamente ocupado y rodeado de musas que lo inspiran en las artes de la pintura y la poesía, alternando versos y pinceles, pinturas y poemas.
La fiebre creadora de este hombre sensible que perfecciona cada día sus habilidades en el estrecho espacio de su celda y el ancho tiempo de la cárcel, no se ha detenido a causa de su reciente traslado desde la prisión de Florence, Colorado, donde sufría su encierro, a la de Marianna, Florida, pasando -de tránsito- por el presidio de Oklahoma.
Todavía en Florence, el pasado 30 de diciembre, Tony experimentó una gran alegría al recibir, mediante su hermana Maruchi, un mensaje del poeta brasileño Amadeu Thiago de Mello, una de las voces líricas más altas de América y del mundo, que simbólicamente le escribió desde la inmensa floresta suramericana.
El texto de este primer intento denota ya las motivaciones del excelso bardo, que hoy frisa los 86 años: “Desde el corazón de la selva amazónica te mando la certeza de que no tardará el día en que volverás a ser un hombre libre por la fuerza de tu amor revolucionario a tu pueblo y a Cuba, tu Patria. La perversa injusticia absurda del imperio que se pretende dueño del mundo y patrón de la humanidad -no vencerá la fuerza de la Esperanza y el triunfo de la Verdad”.
Gratamente sorprendido y estimulado por esta “inyección” de energía y esperanzas, Tony le respondió al autor de Silencio y palabra y Narciso ciego, combinando la prosa con el verso, para expresarle:
“Querido Thiago de Mello:
Me llena de fuerzas su mensaje desde la selva amazónica, pulmón de nuestra América y del mundo.
Tomo sus versos y digo:
Un día todos los días de la semana
se convertirán en mañanas de domingo,
habrá girasoles en todas las ventanas,
(y en los balcones banderas cubanas),
no habrá más dudas, reinará la confianza
como la palma real confía en el viento
(como el malecón confía en la brisa)
Ese fue el inicio de un puente poético dilatado miles de kilómetros, entre los territorios del segundo y el tercer países más extensos de este continente. Tony no esperaría mucho por la respuesta de Thiago, quien le replica: “Bravo y querido Tony, compañero de Poesía y de Esperanza”… y llama al de Antonio “lindo y fervoroso poema, más que gemelo del suyo”, lo que implica ya una equiparación validante de su calidad lírica.
Mezclando también prosa y verso, o mejor aún, en una prosa líricamente inspirada, de Mello agrega, en una especie de portuñol:
Los niños de mi floresta te abrazan,
a ti y a tus hermanos injusticiados,
como abrazaron a Fidel en la fiesta
de sus 80 años.
Y ocurre esto cuando Guerrero entra en contacto con el mundo estrecho de la ergástula floridana en que vivió los últimos 10 años de su existencia, su hermano de ideales René González Sehwerert, antes de ser excarcelado bajo el régimen de libertad supervisada a inicios del pasado mes de octubre.
Motivado al máximo por los éxitos que -aún en prisión- le va deparando la vida, como un guerrero de las artes y las letras, Tony pinta casi cada día y cada vez lo hace mejor. Allí, “desde su altura” espiritual y poética, dibuja sus versos, pincel en mano, y lo mismo brotan mariposas que naturalezas vivas, como esa “foto”, pictóricamente tan lograda, de las dos indias bolivianas con sus atuendos típicos, captadas mientras tejen.
Ya sus pinturas, los cuadros de Tony, se abren paso y ganan notoriedad artística con cada nueva muestra, como la inaugurada en Seattle, estado de Washington, el 12 de enero, bajo el auspicio del sindicato de maestros de esa urbe de la costa oeste de la Unión en la Galería M. Rosetta Hunter.
Entretanto, con sus versos y pinceles, Antonio Guerrero Rodríguez sigue librando su batalla, que es la de todo nuestro pueblo, por su libertad y la de sus hermanos.
Siertamente las rejas ni barrones han podido encerrar los sentimienos civico patriotico ni su lealtad a su pueblo cubano ni a la REVOLUCION pues gracias a ambas tanto ANTONIO GUERRERO como sus bravos y fieles hermanos son cinco puntos de la estrella solitaria gue hace gue todos los cubanos y cubanas con dignidad nos sentimos orgullos de ellos CINCO por el corage y lealtad mostrada en cada verso cada poema en cada obra de arte pese ha este ultimo y aplio recorridos de prisiones vemos el ANTONIO GUERRERO con fuerzas amino positivismo donde no abriga ningun pensamiento negativo esta firme como la bandera cubana ondeando libre y soberana como cuando en 1959 para gloria de los cubanos comenzamos a ser verdaderamente libres hoy son muchos los amigos multiplicados ganados por los cinco luchadores antiterroristas. Lazaro