Escambray Periódico de Sancti Spíritus
El presidente constitucional paraguayo, Fernando Lugo, cuya destitución provocó las sanciones internacionales contra el gobierno actual de su país, declaró ser ferviente partidario de la unidad latinoamericana.
En entrevista concedida a Prensa Latina, Lugo afirmó que apuesta decididamente por la integración regional y continental, y recordó que ese fue el sueño de los próceres y figuras independentistas de la región.
Paraguay, como país mediterráneo, no tiene otra opción que una verdadera integración equitativa, justa, equilibrada, la cual nos llevará a la Patria Grande tan añorada, manifestó.
En el marco de ese deseo integracionista, se refirió a los esfuerzos desarrollados por el Mercado Común del Sur y la Unión de Naciones Suramericanas, los dos grandes bloques del sur del Continente, de los cuales se encuentra suspendido Paraguay a causa del golpe de Estado de junio pasado.
En este contexto, Lugo evocó el resultado de las recientes elecciones presidenciales venezolanas, en las cuales Hugo Chávez logró la reelección para su cargo con el 55 por ciento de los votos.
Esos comicios fueron la reafirmación del liderazgo del presidente Chávez, de un modelo de proyecto político que también apuesta a la integración y a la creación de esa Patria Grande, la cual va tomando forma, se va convirtiendo en realidad, se hace más tangible, más palpable.
Una breve pausa para atender el teléfono y después siguió con su pronunciamiento:
Yo creo que en eso estamos todos los líderes progresistas de esta América Latina, de esta gran región, a nivel del Mercosur y también de Unasur y por ello, queremos felicitar a ese pueblo venezolano por su demostración de civismo y de participación democrática ejemplar, dijo.
Para Lugo, el 55 por ciento de votantes obtenido por Chávez -equivalente a más de ocho millones 100 mil sufragios- en unas elecciones tranquilas, en libertad y transparentes que nadie puede cuestionar, resaltó, es la muestra del estado democrático en que se desenvuelve Venezuela.
Un hecho trascendente que, por cierto, desató las iras del actual gobierno paraguayo, la integración de Venezuela al Mercosur, es para Lugo un impulso al fortalecimiento cada vez mayor de los espacios integracionistas a nivel regional, en los cuales mencionó también a la CELAC y Unasur.
Imposible evitar en la conversación el hecho de que el Congreso paraguayo acaba de rechazar el Protocolo Democrático de Unasur, firmado por Lugo durante su gobierno, y el cual establece sanciones contra Ejecutivos debido a interrupciones del proceso democrático.
Todo lo que suena a participación democrática molesta a la derecha, a la oligarquía, a la clase más conservadora de la política paraguaya, por supuesto que los molesta mucho, concluyó.
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Escambray / ISSN 9664-1277
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