Nuevos precios para la hoja de tabaco

Relacionados

Rafael pone los vegueros a prueba

Vegueros espirituanos recuperan semilleros y continúan la siembra

Una fotografía con matices a Cabaiguán (+fotos)

La medida, aprobada por el Gobierno cubano para los tipos de tabaco rubio y negro, constituye un estímulo a la producción y a la rentabilidad de la vega.

La aprobación por el Gobierno cubano de los precios de acopio en pesos cubanos para los tipos de tabaco rubio y negro (el que se cosecha en la provincia), representa un estímulo a la producción agrícola y también un beneficio a la rentabilidad de la vega.

José Antonio González Fuentes, subdirector de producción de la entidad tabacalera espirituana, refirió a Escambray que es prematuro evaluar el impacto de este proceso iniciado en el territorio en días pasados, pero atendiendo a que ese era un reclamo de los productores, la medida ha sido bien acogida, de ahí que la provincia pretende en esta campaña incrementar los niveles de siembra en unas 200 hectáreas (ha) por encima de lo planificado previamente, 2 200 ha.

Los nuevos precios abarcan la cadena completa de la recolección, tanto para el corte a cuchilla como para el ensarte, beneficiando individualmente los tipos de hojas; de manera que el tabaco principal -primer corte- aumenta su valor máximo en relación con la pasada contienda un 64 por ciento (de 630 pesos el quintal sube a 1 740.95); en tanto, la capadura -retoño de la planta- eleva el precio máximo del quintal a 1 307 pesos, un 74 por ciento de crecimiento.

“Esta medida presupone reajustar también los precios de los recursos que recibirá el productor a partir de la ficha de costo, estos reajustes dan margen para que, con una calidad media, el veguero pueda lograr como mínimo un 36 por ciento de utilidad”, precisa el directivo tabacalero.

Según la propia fuente el mayor despegue de la recontratación comenzada por estos días a raíz del nuevo precio se aprecia en Cabaiguán, el territorio de mayor protagonismo en este cultivo y, hasta mediados de diciembre, se computaban 81 ha incorporadas al programa de siembra, de las 200 a incrementar.

Hasta mediados de mes la provincia reportaba la plantación de 1 821 ha, cifra equivalente al 98 por ciento de lo previsto hasta esa fecha y, de ese nivel, el 80 por ciento de la siembra se materializó entre octubre y noviembre, comportamiento que se corresponde con el calendario definido para la campaña.

“Con el aumento que buscamos en la siembra -llegar a 2 400 ha- se persigue también subir la producción y acopiar 2 750 toneladas de tabaco (177 por encima de lo planificado inicialmente); mientras de forma integral, la cosecha marcha bien, debemos completar las 2 200 ha del plan normal antes de concluir el año y se autorizó al territorio alargar la plantación hasta el 15 de enero, empeño respaldado por la disponibilidad de los recursos demandados y la garantía de las posturas”, expone José Antonio.