Otro invierno de Lunas en Sancti Spíritus

Comienza la VI edición del Festival Lunas de Invierno, con la participación de talentos artísticos procedentes de distintas provincias cubanas.

Entre las teorías acerca del origen de la Luna prefiero aquella que la describe como un astro independiente, que no resistió pasar por el lado de la Tierra sin quedar atrapado en su órbita. Esa especie de atracción se respira por estos días en la ciudad del Yayabo, hasta donde llega, del 13 al 16 de diciembre, el Festival Lunas de Invierno.

El evento, auspiciado por la Asociación Hermanos Saíz (AHS), activa los puntos céntricos de la villa a través del teatro, la música, la literatura, las artes plásticas y la danza. La sexta edición del ya esperado encuentro no implicará solo la interacción con el público en lugares abiertos, sino que pretende extenderse a espacios más íntimos como el Teatro Principal, la Casa de la Guayabera, la Casa de la Música y el Café-teatro.

“Las Lunas”, nombre más popular entre los espectadores, realza el matiz pintoresco de Sancti Spíritus y promete vivencias únicas para el público de todas las edades. Los yayaberos encontrarán que su paso cotidiano recibió, por varios días, el don de tropezar con todas las manifestaciones del arte. Así, el parque Serafín Sánchez y el bulevar de la ciudad recibirán a talentos locales y a otros provenientes de La Habana, Matanzas, Camagüey, Granma y Santiago de Cuba.

Una convención de tatuadores, encuentros teóricos, descargas de música electrónica, conciertos de rock y de hip-hop, proyección de audiovisuales, exposiciones, presentaciones de body art, espectáculos de narración oral, así como actuaciones de compañías de teatro y danza, conforman el cargado itinerario del evento cultural que tomó, desde el pasacalle inaugural, los puntos más importantes de la ciudad.

Las Lunas de Invierno rompen con la monotonía citadina y ejercen una atracción sin igual sobre el público espirituano; la originalidad y frescura del evento mistifica el aire de la villa y la convierte, a pocos días de culminar el año, en una residencia “multilunar”.