Las transformaciones actuales del sistema sanitario cubano distan de las reformas por recortes presupuestarios de otros en el mundo afectados por la crisis económica y financiera, aseguró este lunes el ministro de Salud Pública, Roberto Morales.
En consonancia con los procesos de ajuste económico-sociales que lleva el país, el sector de la medicina trabaja en tres líneas fundamentales: continuar elevando el estado de salud de la población, incrementar calidad y satisfacción con los servicios y hacer eficiente y sostenible el sistema, manifestó.
Asimismo, se trabaja en el rescate del método clínico, con enfoque epidemiológico, como una de las vías para incrementar la calidad de la atención, la eficiencia, el uso racional de los medios diagnósticos y terapéuticos, así como la satisfacción de la población mediante la adecuada relación médico-paciente.
De esta forma, la estrategia cubana alcanzó los propósitos trazados en la Conferencia de Alma-Ata a través de acciones concretas de promoción, prevención y protección de salud con alcance universal, participación comunitaria e intersectorial, expresó.
Los objetivos de desarrollo del milenio están cumplidos en Cuba y se sigue avanzando en ellos gracias a la prioridad que el sistema socioeconómico cubano otorga a estas metas, resaltó Morales en conferencia magistral impartida durante la sesión inaugural de la Convención Internacional de Salud Cuba-Salud 2012.
Explicó que Cuba no escapa a los problemas sanitarios que atraviesa el planeta: el envejecimiento poblacional, las limitaciones financieras, la elevación de los costos y la introducción de nuevos procesos tecnológicos, que obligan a desarrollar acciones de actualización de esquemas de organización y funcionamiento.
Sin embargo, los avances de la salud pública cubana posibilitan enfrentar situaciones complejas derivadas de factores de riesgo como tabaquismo, alcoholismo, alimentación no saludable e insuficiente actividad física, agregó.
Significó que en todo momento los recursos con los cuales la isla alcanzó esos logros se pusieron al sevicio de las naciones necesitadas.
Cuba ha seguido siempre el principio de no dar lo que le sobra, sino de compartir lo que tiene, premisa bajo la cual en estos momentos mantiene una colaboración médica en 65 países con más de 39 mil colaboradores.
El trabajo de ese personal de salud permitió, entre otros aspectos, salvar cuatro millones 78 mil 715 vidas humanas, aseguró Morales.
A la convención asisten delegaciones oficiales encabezadas por ministros de salud de varios países donde los médicos cubanos brindan su servicio, entre ellos los titulares de Brasil, Jamaica, Catar, Angola, Mozambique, Ecuador, El Salvador, Siria y Gabon.
En el evento participan, además, 700 delegados extrajeros junto a 500 cubanos y exponen sus productos 70 firmas del sector biofarmacéutico internacional.
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