Sancti Spíritus entre las provincias de mayor accidentalidad ferroviaria

Sancti Spíritus figura entre las provincias más afectadas por la accidentalidad ferroviaria, un índice en aumento en el país desde el 2010 hasta el presente.

Ronald Bofil, director de Seguridad e Inspección del Ministerio del Transporte (MITRANS), sostuvo que el ganado suelto en las vías y los hechos registrados en los pasos a nivel resultan las causas fundamentales del incremento de la vulnerabilidad del sistema ferroviario cubano.

El territorio espirituano forma parte de un cuarteto de provincias en el que figuran también Villa Clara, Cienfuegos y Pinar del Río como los de mayor incidencia en ese negativo indicador, de acuerdo con un despacho de la Agencia Cubana de Noticias.

Bofil explicó que cada accidente con presencia de ganado provoca pérdidas económicas, en especial para los dueños que tienen que responder por las reses, además de atentar contra los tiempos de transportación de cargas y pasajeros.
También los pasos a nivel o cruces de caminos y vías férreas, principalmente en las zonas rurales, son sitios de colisiones, donde los accidentes adquieren mayores dimensiones, pérdidas materiales y económicas, expresó el funcionario.
A partir de las inversiones en las que está inmerso el ramo en el país con nuevas y potentes locomotoras y recuperación de las vías, en aras del aumento de las velocidades y la prestación de un servicio de mejor calidad, los accidentes se tornan en un serio peligro y pueden causar descarrilamientos.
El problema más lesivo es el de las personas atropelladas en las vías férreas, cifra que igualmente tiende  a incrementarse, luego que en 2011 ocurrieron 47 sucesos, con pérdida de vidas en 30 de los casos, de los cuales 11 estaban en estado de embriaguez, precisó el ejecutivo.
Ya en el primer trimestre del 2012 las víctimas ascienden a 27, de las cuales 10 han fallecido.
Además del desenlace trágico para las personas involucradas, las familias también sufren las secuelas de los accidentes y ocurren pérdidas millonarias por el tratamiento a los lesionados, en asistencia hospitalaria y de seguridad social.
Camagüey, Ciego de Ávila y Matanzas son las provincias que cargan con el mayor número de estos sucesos.
Como parte de la educación vial que debe tener la población en general, Bofil expuso datos que ilustran a choferes, peatones, pasajeros y tripulantes de las dotaciones ferroviarias: una locomotora pesa como promedio 120 toneladas, y a 85 kilómetros por hora al aplicar los frenos se desliza un kilómetro y 100 metros antes de detenerse.
Cualquier violación del tránsito o descuido trae fácilmente funestas consecuencias, al arrasar un ómnibus, vehículo u otro obstáculo en la vías férreas, más los propios daños que puede sufrir un convoy ferroviario.