La tasa de desempleo en Estados Unidos se incrementó ligeramente, lo que constituye hoy una mala noticia para el presidente Barack Obama, quien en menos de seis meses se batirá en las urnas por un segundo mandato.
El mercado laboral generó 69 mil puestos en mayo pasado, el nivel más bajo en un año, señal de un debilitamiento de la economía, comunicó este viernes el departamento de Trabajo.
Durante los dos meses anteriores se crearon 49 mil empleos menos de los previstos, lo cual confirma el desfavorable panorama.
Ello colocó el índice de desempleo en 8,2 por ciento, una décima porcentual superior a lo registrado en abril, el primer aumento en 11 meses, constató el informe.
Tales noticias resultan un balde de agua fría para el mandatario, quien se ha enfrascado en una cruzada para tratar de apuntalar la alicaída economía estadounidense, golpeada por los efectos de la recesión de 2008.
Obama, que aspira a la reelección, tiene como oponente al candidato republicano Mitt Romney, enfrentamiento del cual emergerá vencedor, a juicio de expertos, aquel que pueda convencer a los escépticos y potenciales votantes de resultar el mejor timonel de la nave económica del país.
La economía no está creciendo tan rápido como queremos, afirmó el gobernante durante un acto en la localidad de Golden Valley, en Minnesota.
El jefe de Estado achacó los números rojos a la situación en la Unión Europea, al considerar que la crisis económica en el denominado viejo continente «está empezando a proyectar una sombra sobre el país», estimó.
Por su parte, el candidato por el partido rojo aprovechó la ocasión para arremeter contra las políticas de la actual administración demócrata.
El aumento del índice de desempleo en mayo es una noticia devastadora para los trabajadores y las familias estadounidenses, aseguró Romney en un comunicado.
Está claro que las políticas económicas de Obama han fracasado, consideró el exgobernador de Massachussets.
Afirma Obama que crisis europea obstaculiza recuperación de su país
El presidente de Estados Unidos, Barack Obamaa, justificó este viernes la débil recuperación de la economía de su país con la crisis europea y los altos precios de los combustibles, tras la publicación de resultados negativos en mayo.
Durante un acto en Minnesota, el mandatario afirmó que la situación europea, en particular de la zona euro, obstaculiza el crecimiento deseado en la actividad económica estadounidense.
También admitió que el mercado laboral no genera los empleos necesarios para su total recuperación.
«Tenemos una crisis en la economía europea que está teniendo impacto en todo el mundo y está empezando a proyectar una sombra también sobre nosotros», expresó Obama.
En su discurso convocó al Congreso a que apruebe el plan de empleo que su Gobierno presentó el año pasado, ahora parado por la oposición republicana.
La desocupación en Estados Unidos registró en mayo una tasa de desempleo de 8,2 por ciento y solo se crearon 69 mil nuevos puestos de trabajo, menos de lo planificado por los analistas, que calcularon 150 mil.
Obama insistió en el programa para dar trabajo a los veteranos, un sector donde el desempleo es superior a la media, el cual está dirigido a emplear a unos 126 mil excombatientes.
Al igual que en similar momento del pasado año, la economía estadounidense enfrenta serias dificultades, afirmó el gobernante, entre las que citó los precios de la gasolina que «están golpeando la billetera de la gente muy duramente».
Reiteró que los problemas de la zona euro ensombrecen la economía de Estados Unidos, por lo que había mucho trabajo que hacer antes de llegar a donde necesita el país.
El índice mensual de desempleados es el medidor económico más importante durante este este año.
Además es utilizado para tantear las fortunas políticas de Obama y su rival republicano Mitt Romney en las elecciones presidenciales de noviembre, que dependen de las oscilaciones de la recuperación económica.
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