Escambray Periódico de Sancti Spíritus
Con 2 283 hectáreas sembradas hasta el día 12, la provincia espirituana, segunda plaza tabacalera de Cuba después de Pinar del Río, sobrepasa el plan fijado para la campaña 2011-2012, resultado superior en unas 220 hectáreas a la plantación precedente.
El resultado de un año atrás se ubica entre las más pobres de los últimos tiempos, y que crea las bases para que el territorio mantenga las pretenciones de acopiar las 2 815 toneladas (61 200 quintales) contratados en esta campaña.
Dada la incidencia de Sancti Spíritus a nivel de país en este cultivo, resulta una noticia alentadora la consumación de esta importante fase de la cosecha, toda vez que la mayor parte del tabaco en rama que recolecta el territorio se destina al torcido con fines exportables, actividad para la cual la provincia cuenta con varias fábricas de probada tradición y con experimentada mano de obra encargada de elaborar las diversas vitolas (marcas).
La mayor siembra de posturas se concentra en Cabaiguán (prácticamente la mitad del plan) y municipios como Sancti Spíritus, Fomento, Yaguajay y Jatibonico también rebasaron sus respectivos compromisos; mientas Taguasco, segundo territorio productor de la hoja en la provincia, aún no llega al nivel planificado debido a problemas con el alistamiento de los suelos, por lo que allí las labores se extenderán hasta finales de enero.
Osmel Pérez Puentes, máximo representante de la rama en Sancti Spíritus, dijo que de los 162 productores que no participaron en la última contienda, se rescataron 82; en tanto, se trabaja en el sellaje de los campos para asegurar alta población en las vegas, y añadió que resultó un elemento positivo sembrar el grueso de las áreas entre los meses de noviembre y diciembre, considerado el período óptimo con vistas a obtener mayores rendimientos.
El directivo pondera el mejor comportamiento que ha tenido esta campaña a la hora de garantizar los recursos esenciales, así como la ejecución de un proceso de contratación superior, sin desconocer la necesidad de fortalecer más ese importante paso de la contienda.
Precisa Osmel que entraron en corte las primeras vegas; mientras, la reparación de aposentos (casas para curar la hoja) ronda el 90 por ciento de los previstos, pero, la construcción de nuevas instalaciones exhibe menos avance (de 300 hay edificados 68) dada la tradicional escasez de madera en la provincia para esta actividad, que obliga a trasladarla de otras regiones del país.
“No obstante ese atraso -refiere-, hicimos un levantamiento por cada base productora de la capacidad de curación que tiene cada zona y territorio, y nos arroja que brinda posibilidades para curar todo el tabaco que la provincia se propone acopiar este año, algo que está muy relacionado con que se aprueben por el país nuevos precios para la capadura, una de las principales dificultades expuestas el pasado año por los cosecheros y que propiciaría explotar al máximo las vegas”.
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Escambray / ISSN 9664-1277
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