Durante una conferencia en la Universidad de Ciencias Pedagógicas Capitán Silverio Blanco, de Sancti Spíritus, Aleida Guevara expresó que los Cinco son los mejores hijos del Che, porque lo practican en vida.
“¿Cuántos han leído textos originales de Ernesto Guevara?”, parecería una pregunta habitual del profesor de Historia en su clase; mas, la interrogante lanzada al auditorio universitario provenía de quien tiene en las venas la sangre del Che. Durante su visita a la ciudad espirituana, Aleidita, como la conocemos todos desde aquella última y legendaria carta, sostuvo varios intercambios con esa “arcilla fundamental de nuestra obra” para la construcción de un nuevo hombre: la juventud.
A 45 años de los disparos en La Higuera que marcaron la inmortalidad de un sueño, “lo importante es que ustedes sean capaces de leerlo; pero, sobre todo, de practicarlo. Los Cinco son los mejores hijos del Che, porque lo practican en vida y, por tanto, son mis hermanos”, expresó durante la coloquial conferencia Desafíos para los jóvenes de una nueva sociedad.
Indudable herencia genética. La jocosidad y el humor mezclados con argot cubano-argentino engancharon a todo un teatro joven en la Universidad de Ciencias Pedagógicas (UCP) Capitán Silverio Blanco Núñez, donde el estudiantado recibió las lecciones de una semana o más, en alrededor de dos horas, sin siquiera notar el reloj. Intercaladas con anécdotas riquísimas en detalles e interés, las frases del genial hombre de boina negra parecían salidas del hoy.
“Los muchachos entienden bien lo que él está diciendo porque lo podemos llevar a nuestra realidad actual, no son conceptos que se quedan en la estratosfera ni son difíciles, sino de la vida cotidiana, que nos obligan, si los llevamos a la práctica, a ser mejores seres humanos. Ese es el objetivo, que los muchachos se den cuenta del potencial humano que realmente tienen y que el Che nos está pidiendo desde hace muchos años”, declaró Aleidita en exclusiva para Escambray.
Aunque, clases de sencillez, antirracismo, honradez, sinceridad, amor al trabajo, solidaridad, patriotismo e internacionalismo no solo llegaron a los alumnos por los discursos, cartas y manuscritos del que murió alumbrando toda América Latina. Ella misma devino ejemplo de ese pensamiento, materializado en la acción: “Una mujer indígena me enseñó a ser mejor profesional de la salud” (…) ¿Cuántos de ustedes han cortado caña? Desde el día en que yo lo hice, beso el piso por donde pasa un cañero cubano”.
Los consejos no faltaron: “Traten de disfrutar y aprovechar al máximo la juventud, pero nunca pierdan la perspectiva. El pueblo necesita de la fuerza y la juventud de ustedes, de las neuronas de ustedes; es el pueblo quien nos gradúa de verdad cuando somos capaces de ser útiles a nuestra gente. Esas cosas son las que hacen posible que el Che siga vibrando en ustedes los jóvenes”.
Además de esta jornada con los educandos de la Universidad de Sancti Spíritus José Martí (UNISS), Aleida Guevara sostuvo encuentros con los futuros maestros, los alumnos del IPVCE Eusebio Olivera, la Universidad de Ciencias Médicas y la escuela primaria Serafín Sánchez, donde “fue para mí muy lindo, yo me divertí muchísimo, porque los niños son con los que más trabajo siempre, soy pediatra y el lenguaje corporal de ellos es algo extraordinario, tú sientes esa energía. Cuando cantaron, hicieron un coro que si la profesora Digna Guerra hubiera estado ahí hubiese sentido envidia”.
¿Qué usted cree que ha dejado en Sancti Spíritus y qué se lleva de esta ciudad?
“Bueno, esto es una batalla larga, no es de un momento, ni de venir unos días, y hablar un poco, sino de ir sembrando algo. Me llevo el calor humano, para mí eso es lo más importante. Este es un lugar donde al Che lo quieren muchísimo, como en muchas partes de Cuba; vengo a hacer visitas cortas, pero me llevo el sentimiento de un pueblo que ama, un pueblo que respeta, un pueblo que trabaja”.
Así, Aleidita se despide de la tierra del Yayabo, con el mismo estilo de ese hombre excepcional que nunca decía adiós, pues esperaba el mañana con una victoria siempre: “Hasta pronto”.
Indudable ALEIDITA presenta tremendas credenciales de muchos valores heredados el cual queda completamente madurado con su inmejorable sensatez amabilidad y carisma que la convierte en una excelente representante del CHE no solamente por su extraordinario vincular de las dos sangre que lleva que de por si son honrosa a la vez se a preparado para poder lleva esta hermosa y virtuosa actitud pues en ALEIDITA es el objetivo central entre la juventud ESPIRITUANA pues constantemente practica y predica el ejemplo con voluntad y conciencias digna de dos grandes ejemplos para los cubanos por lo cual estas conversaciones con educando ESPIRITUANOS confirma que la herencia del CHE esta dentro de la extraordinaria ALEIDITA. Lazaro izquierdo