Vegueros espirituanos inmersos en la cosecha de tabaco

Las vegas de tabaco en la provincia de Sancti Spíritus comenzaron desde hace días a cambiar su imagen, a raíz de iniciarse la cosecha en medio de condiciones climáticas muy favorables para la recolección de la aromática hoja.

Los más de 190 000 cujes acopiados al término de enero del tipo principal -primer brote de hojas de la planta- sobrepasan en un 5 por ciento lo previsto para la etapa; en tanto, la campaña de forma total concibe recolectar un millón de cujes de este tipo y otros 450 000 de capadura, en una segunda fase de la cosecha para aprovechar ese rebrote de la vega.

En el territorio espirituano, segunda plaza tabacalera de Cuba, a la hora de la cosecha predomina la modalidad sol en palo -cortado con cuchilla y situado en el cuje-, que incluye días de secado en el campo antes de ser trasladada la hoja al aposento, donde se completa el proceso de curación.

Según expone José Antonio González Fuentes, subdirector de Producción de la empresa tabacalera espirituana, el estado de las vegas es bueno y se manifiesta en el favorable rendimiento del corte de la hoja principal; a la vez que en febrero la cosecha tendrá su momento pico, porque entran en fase de recolección las áreas sembradas en noviembre, mes que concentró el grueso de la plantación.

Mientras en muchos campos de tabaco el paisaje se desplaza hacia el ensarte en cujes, la provincia mantiene activa las labores de reparación y construcción de aposentos -casas de curar la hoja-, considerado el escalón más comprometido de la campaña, que ha obligado a trasladar madera de otras regiones del país, ante el déficit de ese recurso en Sancti Spíritus.

La cosecha de tabaco involucra actualmente en el territorio a unos 1 300 cosecheros, radicados principalmente en áreas de Cabaiguán y Taguasco, zonas con arraigo y tradición en este cultivo, uno de los principales rubros exportables de la provincia y que, en términos productivos, contempla niveles superiores a los de la contienda precedente.