Casi seis millones de personas en diversos países aprendieron a leer y escribir con el método cubano de alfabetización Yo, sí puedo, aseguró este miércoles la asesora de la ministra de Educación, Enia Rosa Torres.
A los 5,8 millones de alfabetizados se suman unos 723 mil 900 graduados del Yo, sí puedo seguir, un programa ideado también en el país caribeño que garantiza la enseñanza elemental, de acuerdo con los datos brindados por Torres en una rueda de prensa.
Tras destacar que actualmente el sector tiene más de dos mil 200 colaboradores en 28 naciones, la asesora afirmó que el énfasis lo ponen en los países miembros de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA).
Gracias a ese esfuerzo, significó, Venezuela (2002), Bolivia (2009) y Nicaragua (2011) se declararon libres de iletrados con el Yo, sí puedo, que cuenta con 14 versiones, ocho de ellas en español, una en inglés, otra en portugués, además de en creole para Haití.
También están presentes las adaptaciones en las lenguas indígenas aymara y quechua, acción que fue fundamental para conseguir la declaración de Bolivia libre de analfabetismo. La última se creó en tetum para Timor Leste.
Torres señaló que un millón 29 mil 700 adultos transitan por los cursos del programa cubano, que normalmente se desarrolla en 10 semanas con el apoyo de medios audiovisuales y un facilitador.
Además, un millón 227 mil 200 personas se preparan en programas de postalfabetización con el apoyo cubano, argumentó.
La Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) le dio dos menciones honoríficas en 2002 y 2003, y el Premio de Alfabetización Rey Sejong en 2006 a los creadores del método en el Instituto Pedagógico Latinoamericano y Caribeño.
El galardón fue entregado al programa por adaptarse a los contextos sociales, culturales y étnicos de las naciones, además de desarrollar en las lecciones temas relativos a la familia, la protección del medio ambiente, la salud y la higiene.
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