Con la madera como materia prima y el ferrocarril como motivo, un joven de Yaguajay se cuela por los caminos del arte.
Todo comenzó en el 2003, cuando el Día de San Valentín le recordó el regalo para la novia y se puso a labrar, en un trozo de madera, un cofre en forma de piano; sin embargo, lejos estaba de imaginar entonces Yaquel Gómez Yrigoyen que desde ese instante su vida tendría otros incentivos.
“Orelvys, un amigo, al verme en esos trajines me brindó su carpintería para cuando yo quisiera, pero me dije: lo mejor es tener mi propio taller -sostiene-. Comencé a armarlo, y en ese ajetreo me dieron vueltas en la cabeza mil ideas, si hacer carros antiguos, barcos, pero esos ya eran caminos trillados. Fue ahí cuando tomé la decisión de moldear en maderas las viejas locomotoras cañeras”.
¿Cómo logras ponerle a cada pieza todos los detalles del original, sin faltar un tornillo, una válvula, un remache?
Yo no estudié arte, soy técnico en Sistema Eléctrico Industrial y lo complejo me atrae, sobre todo esa cantidad de detalles que se convierten en una especie de madeja o rompecabezas, pero que hacen más hermosa la pieza. Es precisamente eso lo que me motiva, que sea una obra difícil.
¿Por qué la madera?
Trabajar el metal u otros materiales comunes no es complicado, pero en el caso de la madera son las manos y las ideas las que le dan forma, ella da la posibilidad de moldearla.
Por ejemplo, lo último que hice fue una instalación con un primo mío, Mauro Rojas Gómez, artista de la plástica de Trinidad. Él dibujó las locomotoras-cañeras de vapor, como las que abundaban en Narcisa y Vitoria, y también los otros elementos del ferrocarril de esa época.
Entonces yo hice en madera las ruedas, los brazos de unión y otras piezas; sobre el dibujo insertamos los aditamentos y logramos una tercera dimensión en las obras, lo cual fue muy interesante para el público que colmó la exposición en febrero pasado.
¿Proyectos?
Seguir con la temática del ferrocarril y avanzar en un proyecto conjunto con Nelson Domínguez. Ideas me sobran, pero necesito multiplicar las horas.
Escambray se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, así como los que no guarden relación con el tema en cuestión.