El secretario de Estado, John Kerry, reiteró este viernes que continúa latente la posibilidad de una acción militar de Estados Unidos contra Siria si incumple la promesa de poner sus armas químicas a disposición de instituciones internacionales.
Kerry dijo que las fuerzas del Pentágono permanecen listas para atacar objetivos del país árabe si este no llega a un acuerdo creíble y de rápida implementación sobre dichos armamentos.
Sin embargo, el canciller ruso, Serguei Lavrov, afirmó este viernes que Estados Unidos debe retirar la amenaza del uso de la fuerza contra Siria, y negó la posibilidad de que esta opción se incluya en una posible resolución de Naciones Unidas, señaló la cadena CNN.
Miembros del Consejo de Seguridad de la ONU tienen previsto reunirse el próximo lunes para recibir un informe detallado sobre los resultados de las investigaciones del organismo internacional en torno a los ataques con armas químicas contra civiles el 21 de agosto pasado en las afueras de Damasco.
La cadena noticiosa Bloomberg News, filtró que el reporte de los inspectores internacionales parece insinuar una condena al gobierno de Assad por ese incidente, a pesar de que en reiteradas ocasiones las autoridades sirias sostienen que fueron los grupos armados por Occidente.
Cuando los inspectores internacionales culminaron su trabajo en ese país árabe dijeron que solo reportarían si fueron o no utilizadas armas químicas, pero que no estarían en capacidad de decir quién las utilizó, recuerdan medios de prensa.
Durante un evento internacional este viernes en Nueva York, el secretario general de la ONU, Ban ki-moon se hizo eco de las acusaciones de Washington contra las autoridades sirias y acusó a Assad de perpetrar crímenes contra la humanidad.
Según el diario The Washington Post, Estados Unidos informará a los rusos acerca de los sitios donde se supone están almacenadas las armas químicas de Siria, y a sus vez Moscú entregará su propia valoración sobre el tema.
En el plano militar, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Charles Hagel, y su homólogo del Reino Unido, Philip Hammond, conversaron hoy por teléfono sobre posibles opciones bélicas para el conflicto, si no tienen éxito las negociaciones con Moscú.
Ambos funcionarios revisaron la estrecha coordinación que existe entre Londres y Washington a través de canales diplomáticos para abordar la situación en torno a Siria, así como el supuesto uso de armas químicas por parte del gobierno de Damasco.
Hagel actualizó a Hammond acerca de la ubicación de las fuerzas estadounidenses en la región del Medio Oriente y los posibles planes si la Casa Blanca ordena una operación militar contra las unidades leales al presidente Bashar Al Assad, señaló este viernes el vocero del Pentágono, George Little.
Sin embargo, el portavoz declinó responder si ambos titulares d discutieron el posible uso por parte de las fuerzas armadas estadounidenses de las bases británicas en la región para un posible golpe contra Siria.
El presidente Barack Obama ordenó a sus fuerzas continuar la amenaza bélica contra el gobierno de Damasco y estar listas para atacar si fracasaran las conversaciones sobre la iniciativa de Rusia y Siria de poner a disposición de organismos internacionales las armas químicas de la nación levantina.
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