Escambray Periódico de Sancti Spíritus
Durante el balance a nivel de cooperativas, el campesinado espirituano saca a la luz las principales dificultades que existen en la base productiva para enfrentar los diversos programas agropecuarios.
Con los matices y la transparencia que distinguen al campesinado el proceso de balance de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP), iniciado en febrero y previsto a concluir a inicios de mayo con la asamblea provincial, ha devenido una objetiva mirada a la vida interna de la organización y al cambio que requiere esa estructura para atemperarse al nuevo modelo de gestión que se implementa en la economía cubana.
Si una enseñanza puede identificarse de este debate guajiro, es sacar a la luz las principales dificultades que existen en la base productiva para enfrentar los diversos programas agropecuarios que recaen sobre el sector cooperativo y campesino, el de mayor aporte en el territorio.
Noel Gil Plasencia, presidente de la ANAP en Sancti Spíritus, explicó a Escambray que el proceso aporta claridad sobre cómo la organización tiene que intencionar y discutir los planes agropecuarios o los incumplimientos en que se incurren por diversas causas y, también mostró la necesidad de enfrentar con mayor rapidez la tramitación de las respuestas o soluciones a los problemas que laceran el avance productivo.
“Ha sido muy importante analizar en la base un aspecto tan medular como la contratación, su veracidad y el cumplimiento que debe existir por parte del campesino y del estado de todo lo que esté pactado, porque al evaluarlo por dentro hemos visto que hay cooperativas que no les llegaron a todos los productores y la indicación es involucrar a cada campesino en ese paso, tenga o no respaldo del paquete tecnológico; aunque hay que reconocer que existen atrasos o incumplimientos con la entrega de esos insumos”, expresó el dirigente anapista.
El proceso de balance de la ANAP trajo consigo el fortalecimiento de la dirección de las cooperativas, a partir de la fusión de las anteriores estructuras en una sola junta directiva compuesta por cuatro miembros profesionales, quienes podrán ahora dedicar todo el tiempo al trabajo de dirección.
Además de interiorizar en el contrato y la llegada tardía de los insumos, en las más de 200 reuniones campesinas el debate abarcó otros asuntos como las complejidades de la comercialización, el trabajo político-ideológico, la política de cuadros y sus reservas y la poca participación en las asambleas de representantes de las empresas de la Agricultura.
Convertir la asamblea mensual en el espacio principal para revisar y proyectar el trabajo de la cooperativa y motivar la incorporación de las mujeres y los jóvenes constituyen valiosas conclusiones emanadas de este balance que toma como línea para el debate tres vertientes principales: defender los principios de la Revolución por encima de cualquier interés de clase o individual, la preparación política e ideológica del cooperativista y su familia y trabajar en el funcionamiento interno para respaldar la producción y las entregas a los destinos priorizados.
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Escambray / ISSN 9664-1277
Es necesario que tanto la prensa escrita como digital y en general todos los medios de comunicación de nuestro país sean más claros y dejen de dar tantos rodeos para tocar este tema tan importante y que tanto afecta al campesinado cubano y al pueblo en general. Como profesional e ingeniero agrónomo que soy siento mucho dolor cuando visito a campesinos y me plantean que no les dan insumos (insecticidas, herbicidas, fungicidas y fertilizantes) para producir alimento y muchas veces tienen que comprarlos en el mercado negro a altos precios. La otra cara de la moneda es la comercialización de lo que producen, si lo contratan con acopio muchas veces se pierden las cosechas enteras porque no vienen a buscar lo que tanto sacrificio y sudor le costó producir a los campesinos y si no cumplen el plan de entrega, entonces los demandan. Lo otro que tanto afecta al campesino y al pueblo en general son los precios, acopio le compra los productos como 2da o 3ra y los venden en los mercados como 1ra y a unos precios que no todos podemos comprar. Esos precios tan elevados provocan que la mayoría del pueblo compre pequeñas cantidades y los mercados se mantienen llenos o abarrotados de productos y por esa razón acopio no le compra al campesino y esto trae como resultado la pérdida de gran cantidad de alimentos en los campos de todo nuestro país. Esto es algo que veo cada vez que salgo de recorrido y espero que algún día no muy lejano sea historia para contar, porque de lo contrario el problema de la alimentación jamás se resolverá si persisten estos problemas.