La decisión de Estados Unidos de mantener a Cuba en un listado de naciones terroristas carece de credibilidad internacional por su sesgo político.
Así lo consideró Jesús Arboleya, premio Casa de las Américas con el ensayo Cuba y los cubanoamericanos. Un análisis de la emigración cubana.
«Se trata de un acto unilateral sin ninguna credibilidad, no está refrendado por ningún organismo internacional», subrayó Arboleya en entrevista exclusiva con Prensa Latina.
Recordó que Cuba fue incluida en esa lista en 1984 durante la administración del presidente Ronald Reagan. Entonces el pretexto era que La Habana apoyaba a las guerrillas colombianas. Desde entonces la lista se utilizaba para satanizar a movimientos revolucionarios y otros que fueran contra los intereses de Washington, agregó.
Administraciones republicanas y demócratas han hecho un uso propagandístico de ese listado con el fin de justificar la política de Estados Unidos contra Cuba, indicó Arboleya, doctor en ciencias históricas.
Pero señaló que el tema tuvo un salto cualitativo tras los atentados del 11 de septiembre de 2001.
«Aparecer en la lista implicaba el peligro de una invasión militar y todo un engranaje legal por el cual se persigue incluso a cualquier Estado bajo la excusa del terrorismo», añadió.
El también profesor titular adjunto de la Universidad de La Habana aseguró que tal política ha colocado a la Casa Blanca en innumerables contradicciones.
«La más evidente tiene que ver con Luis Posada Carriles, con cuya impunidad Estados Unidos incumple con todas las normas que impuso en el Consejo de Seguridad de la ONU para el tratamiento de casos de terrorismo», explicó.
Posada Carriles vive en Miami sin impedimentos legales, a pesar de ser reclamada su extradición por Cuba y Venezuela por la voladura de un avión comercial cubano en 1976, atentado en el que perecieron 73 personas.
El país que elabora listas negras es el mismo que jamás ha extraditado a Cuba a ninguno de los cientos de esbirros de la dictadura de Fulgencio Batista que cometieron crímenes mayores contra el pueblo cubano, sostuvo el entrevistado.
Estados Unidos ha ejercido el terrorismo de Estado en su máxima expresión, consideró el experto.
«Washington ha apoyado a grupos terroristas en todas partes, en particular contra Cuba. No hay que olvidar el respaldo, en su momento, a al Qaeda, organización de la que fue uno de sus instigadores», dijo.
Puntualizó que mantener a Cuba en ese listado es parte de la inamovilidad de la política fracasada de Estados Unidos hacia la isla.
«Cambiarla significa reconocer la legitimidad de la Revolución cubana y eso para los círculos de poder en Washington es un asunto doctrinario», finalizó.
Escambray se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, así como los que no guarden relación con el tema en cuestión.