Gallos de nuevo entre los cuatro grandes

Después de cinco campañas fuera de la cúspide, los Gallos regresaron al selecto club de los cuatro grandes del béisbol cubano. Eso es lo que cuenta, aun cuando su pálido desempeño en las últimas salidas tenga a una parte de la afición con las alas caídas y contra el equipo.

El conjunto espirituano debe consolidar su juego si pretende disputarse el título.Después de cinco campañas fuera de la cúspide, los Gallos regresaron al selecto club de los cuatro grandes del béisbol cubano.

Eso es lo que cuenta, aun cuando su pálido desempeño en las últimas salidas tenga a una parte de la afición con las alas caídas y contra el equipo. Es lo que cuenta, pese a que al momento de la clasificación los medios nacionales soslayaran la noticia.

Hasta hoy, solo dos elencos pueden preciarse de tal tranquilidad, los únicos que han sobrepasado la ansiada línea de las cincuenta victorias. Todavía campeón y subcampeón de la pasada campaña se desangran para no quedar fuera de la discusión de medallas.

Para ser objetivos, la lectura no puede ser tan simplista. Los Gallos no accedieron a semifinales gracias a la derrota de Industriales el pasado miércoles; lo lograron por su propio peso, pues la clasificación no se decide ni en un partido ni en una subserie.

Sancti Spíritus decidió su suerte hace rato al mantenerse en el 1-2 durante una campaña de 87 juegos en la que no importa si se logra el boleto antes o después, sino alcanzarlo. Amén del descalabro en las últimos cinco cotejos particulares, ningún elenco ha logrado desbancarlo de ese sitial de privilegio.

No se deje cegar por las pasiones o el fanatismo. Con esta, suman 11 las ocasiones en que los Gallos acceden a los primeros ocho (no digo play off porque la nueva estructura no admite esa comparación) y cinco que lo hacen entre los cuatro (tres de ellas con medallas: una plata y dos bronce).

Ha sido una batalla intensa y desgastante. La cómoda ventaja desde el inicio les ha permitido jugar mucho más relajados y sin la presión del resto de los conjuntos, por lo que no han debido emplearse a fondo como sí lo hicieron en la primera fase, cuando pocos los daban favoritos para seguir. Tal vez ello explique el cansancio generalizado que asoma en la tropa de Aragón y la racha adversa, normal en cualquier conjunto en una campaña tan larga.

No crean que desestimo lo maltrecho que ha lucido el equipo en los últimos partidos y cómo esto puede influir en la batalla final. En mi opinión, una cosa no tiene que ver con la otra. Se sabe que el play off es una especie de miniserie en la cual lo más importante es la actitud con que se asuma. Solo queda esperar si los Gallos serán capaces de voltear la mala imagen de equipo sin garra ni armas para esa guerra que los ha distinguido históricamente.

No volteo la espalda a algunos puntos rojos. El primero de ellos es el estado actual de su principal carta de triunfo, Ismel Jiménez , trasformado en otro lanzador tras su regreso del Clásico y a quien, desde mi punto de vista, se le debió hace rato dar un “refrescón”, sobre todo porque Sancti Spíritus no ha tenido su clasificación comprometida como para exponerlo a un castigo tan fuerte.

Lo que más preocupa en Ismel no es su balance de triunfos en esa segunda fase (4-3), sino la facilidad con que le batean los contrarios y su efectividad. En la primera fase el trinitario exhibía un balance 9-0 con 60 ponches, bateo contrario de 200 y 1.06 Promedio de Carreras Limpias (PCL). Hoy los números hablan de su transformación: los rivales le batean para 318, solo tiene 22 ponches y su PCL es de 3.75. Confiamos en que pueda levantar y retome su liderazgo cuando la candela arrecie.

Pero no ha sido solo él. Los abridores en general no aguantan, al punto de ser quintos con 3.38 PCL; además, preocupa el control. En la primera vuelta solo concedieron 92 por 123 ahora. Si las cosas no andan peor es porque la situación es similar en el resto de los conjuntos. Con 3.57 PCL (por 2.65 en la primera vuelta), los lanzadores espirituanos siguen por encima de la media: 4.01.

La excepción ha sido el novel Norge Luis Ruiz, toda una revelación con su balance de 5-1 y su efectividad de 1.53, que lo mantiene entre los mejores lanzadores de la justa. También el refuerzo Yaisel Sierra, con 2-1 y seis juegos salvados y 1.55 PCL para ayudar al principal apagafuegos Omar Guardarrama, quien acumula 16 salvamentos, cuatro de ellos en esta vuelta.

Pero si desde el box se advierten lagunas, mucho más se perciben en el bateo, que ha descendido hasta 261 (séptimo entre los ocho conjuntos) de 282 en la primera fase. En tal resultado decide tanto la ausencia de algunos regulares como el bajo rendimiento de otros. Más que el average, incide la productividad: de 508 corredores encontrados en posición anotadora, solo 92 han llegado a home, un indicador que tiene en Frederich Cepeda y Yunior Paumier a los más oportunos con 16 y 14 impulsados, respectivamente. La producción de impulsadas ha bajado de manera ostensible. Si en la fase inicial Sancti Spíritus llegó a tener a cuatro entre los primeros 10 del torneo, hoy solo figura Cepeda con 57.

Si algo alienta en esta vuelta ha sido la mejoría de la defensa, que de los 965 de la primera vuelta ha mejorado hasta 976, aún por debajo de la media de 979.

Tal comportamiento ha llevado a que Sancti Spíritus sea el quinto equipo en ganados y perdidos de esta vuelta luego de concluir primero en la fase de 45 partidos.

Con su boleto en el bolsillo, a los Gallos solo les resta concentrarse en los play off, más allá de la aspiración de ganar, aunque hacerlo ante Industriales en esta última subserie a partir del lunes tal vez les dotaría de la “insulina” que necesitan para encarar su reto más difícil.

Ya sé que no todos tienen la determinación de Pavel Baracaldo o de Alexis Barceló, dos furibundos seguidores de los Gallos que, después de tantos descalabros, han decidido “vivir el momento de cada juego” antes que exponer su corazón a la agonía de los play off. Y usted, ¿los sigue o piensa más en grande?

Elsa Ramos

Texto de Elsa Ramos
Premio Nacional de Periodismo Juan Gualberto Gómez por la obra del año (2014, 2018 y 2019). Máster en Ciencias de la Comunicación. Especializada en temas deportivos.

4 comentarios

  1. Ramón Miranda

    Interesante comentario, es real, solo hace falta que los gallos canten y se dejen de culpara a peloteros, es ironico leer como se pide que Yulieski acabe de pasra para los Industriales, en uni de los comentarios, cuando es un pelotero que todos lo quieren tener, los que lo critican es la impotencia lo que los mueve al no poder contar contan valioso pelotero, repito lo que hace falta es que los gallos acaben de cantar.
    Una nota, el equipo que apoyo no es Sancti Spiritus, no me incomodaría su triunfo, pero no es el que apoyo.

  2. ESTOY MUY DE ACUERDO CON EL COMENTARIO ANTERIOR, EL LOS PLAY OF CUALQUIER PELOTERO PUEDE CONVERTIRSE EN LIDER, QUE PARA MI ES LO QUE LE FALTA AL EQUIPO, PORQUE NI EL MISMISIMO CEPEDA QUE ES EL MEJOR Y MAS OPORTUNO DE CUBA DEL MOMENTO ES LIDER AQUI, OTROS COMO YULIESKI ESTAN MUY MALTRATADOS INJUSTAMENTE PARA MI POR LA PRENSA Y SU PROPIA AFICION QUE ES MUY DURO PARA UN ATLETA PERO SIGO PENSANDO QUE TENEMOS PARA REACCIONAR, LOS MEJORES O LOS MENOS BUENOS PORQUE TODOS SON BUENOS Y EN VERDAD LLEGO EL MOMENTO DE LLENARSE DE CORAJE Y DE C…. QUE ESTOY SEGURO QUE A NINGUN ESPIRITUANO LE FALTA, HASTA EL PROPIO SOSA, RECORDANDO EL BATE QUE LE SACARON Y ASI SUCESIVAMENTE HAY RAZONES PARA COMBATIR DURO COMO SEA.

  3. Siempre se espera que Yulieski decida el juego bueno pero no sucede, que Eriel lo haga y no sucede, creo que lo mejor que puede pasarle al equipo es que Yulieski se valla para Industriales ya para que no de mas batazos de doble play cuando tiene que decidir, al equipo le faltan peloteros con liderazgo, eso no lo tienen hace rato y es lo que hace falta en los equipos

  4. Con toda justicia llega este comentario para dejarnos ver los que se tiende a opacar con la pobre imagen de SS en las ultimas semanas. Desafortunadamente se trata de SS y no de otro equipo, por tanto se impone el estigma funesto que los ha seguido en los ultimos años tras sus malas actuaciones en los play off. Cierto es que estan entre los 4 grandes y mas que eso, de ganar Cienfuegos su play off semifinal y ellos mantener su segundo lugar en estos 4 juegos, tendrian asegurada una medalla aunque pierdan el play off semifinal. Claro, hay que hacer una salvedad y es que en años anteriores se llegaba a los 4 grandes ganando al menos 1 play off y eso hace muchos años que el equipo no lo hace. Recuerdo la temporada de las 64 victorias que quedaron 5to, solo porque no le ganaron a IND el primer play off y sin embargo el resultado cuantitativo fue incluso superior a este.
    Afortunadamente estan por ahi los aficionados furibundos que no cejan y que mantienen la esperanza en que si se puede. Es dificil, muy dificil creer pero como buienos espirituanos es lo que menos podemos hacer.
    El equipo debe llegar en mejores condiciones al play off. Si esto no fuera posible, me gustaria oir de la propia direccion que los lesionados no estan recuperados o que Ismel esta cansado o lo que sea para que la expectativa este acorde a la realidad que viene. Aun asi, yo sigo esperando que Yulieski decida un juego, Peña gane otro, Eriel de un batazo a la hora buena y un jugador de menos calibre se imponga. Ejemplos hay muchos y unos cuantos contra SS. Ahi esta Wilber de Armas sustituyendo a German lesionado, Jesus Toledo contra el propio equipo SS en un play off con La Habana para despues desaparecer del beisbol, Maicel Diaz en el play off del 2006 cuando gano el 7mo juego en el Huelga con rectas de 80 millas o el tristemente desaparecido receptor pinareño William Otaño que en su momento hizo historia en play off a jonron limpio….claro contra SS. Es que acaso no tenemos nosotros peloteros que puedan hacer eso? Llegar a un momento como ese y hacer la hombrada? Por que los demas si y nosotros no? Esten como esten los grandes el equipo tiene un compromiso que para mi no se queda en estar entre los 4 grandes que como les dije antes, para mi tiene un asterisco porque no se gano esa condicion en un play off. En definitiva si las temporadas se ganaran por todos contra todos a 150 juegos, quizas tuvieramos 2-3 campeonatos.

Escambray se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, así como los que no guarden relación con el tema en cuestión.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *