La estatua de tres metros fue develada en la capital guatemalteca, como homenaje a los 160 años del natalicio del prócer cubano.
Una estatua de tres metros de altura del prócer cubano José Martí fue develada este martes en una las principales calles de la capital guatemalteca, como homenaje a los 160 años de su natalicio.
«Es un templo a la hermandad y un reconocimiento a la lucha de los dos pueblos», dijo durante el acto el ministro de Cultura de Cuba, Rafael Bernal, de visita en Guatemala.
La estatua de Martí, diseñada por los artistas cubanos Andrés González y Luis González, mide tres metros y está sobre un pedestal de más de seis metros construido en 1973 por el guatemalteco Efraín Recinos, ya fallecido.
El pedestal fue diseñado originalmente para sostener una estatua ecuestre del expresidente guatemalteco Justo Rufino Barrios, (1835-1885), trasladada hace un lustro hacia el centro de la capital.
La obra está ubicada en la plaza-jardín José Martí en Avenida Las Américas, una de las más importantes de la capital guatemalteca, en la que también hay estatuas en homenaje a Simón Bolívar y Juan Pablo II, entre otras.
Bernal explicó que la plaza es parte de un proyecto iniciado en 2010 cuando se inauguró la Plaza Guatemala en Cuba con dos estatuas de los creadores del himno nacional guatemalteco, el cubano José Joaquín Palma (letra) y el guatemalteco Rafael Ovalle (música).
La efigie fue elaborada con la técnica del ferro cemento, que consiste en recubrir con cemento y polvo de piedra una armazón de barras de hierro y alambre que le brinda la estructura y fuerza para mantenerla de pie.
«Martí dejó huella en Guatemala, era un hombre que vagaba sin fronteras, porque vivió en muchos países, incluso en Nueva York», recordó el canciller guatemalteco Fernando Carrera.
Martí residió entre el 26 de marzo de 1877 y el 27 de junio de 1878 en esta nación centroamericana, donde se destacó como docente y orador.
Según las crónicas, Martí tuvo un romance con María García, hija del expresidente Miguel García Granados (1871-1873), pero estaba comprometido y viajó a México. La mujer enfermó y luego falleció, lo que inspiró al poeta cubano el poema «La Niña de Guatemala».
(tomado de Cubasí)
Escambray se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, así como los que no guarden relación con el tema en cuestión.