El debate de alto nivel en la Asamblea General de la ONU, concluyóeste martes con un llamado de su presidente, John Ashe, a construir una agenda común en función del desarrollo sostenible.
Después de siete jornadas de debate general en el 68 período de sesiones de la Asamblea -en la que se realizaron alrededor de 200 intervenciones-, Ashe resumió los principales reclamos y planteamientos de los 193 países que integran el principal órgano de las Naciones Unidas.
El diplomático de Antigua y Barbuda recordó que el foro instalado el pasado 24 de septiembre en la sede de la ONU, en Nueva York, estuvo centrado en la necesidad de una agenda de desarrollo posterior a 2015, cuando se vence el límite fijado para el cumplimiento de las metas anti-pobreza conocidas como Objetivos del Milenio.
Durante la semana, escuchamos a los estados señalar que la nueva agenda debe tener en cuenta la cultura, la educación, el cambio climático, la creación de empleos, la energía sustentable, la inclusión social, el acceso al agua, la agricultura, el uso adecuado de los océanos, la seguridad alimentaria y la salud, entre otros aspectos, dijo.
Según precisó, los representantes de la comunidad internacional también llamaron a considerar parte del desarrollo futuro, la paz, los derechos humanos, la democracia; el empoderamiento de la mujer, los indígenas, los jóvenes y los discapacitados; el desarme nuclear y el rechazo al terrorismo.
Varias delegaciones, prosiguió, hicieron énfasis en la importancia de la cooperación Sur-Sur, en su rol de complemento a la Norte-Sur, en la necesidad de atender las vulnerabilidades de los pequeños estados insulares y en el impulso al cumplimiento de los Objetivos del Milenio, a menos de 850 días del límite fijado.
En lo relacionado con el funcionamiento del sistema de las Naciones Unidas, reconoció las demandas de revitalización de la Asamblea y de reforma del Consejo de Seguridad, así como una mejor coordinación entre ambos órganos.
Respecto a temas como la crisis en Siria, expuso que primó el deseo de una salida negociada al conflicto, a partir de escenarios como la celebración de una segunda conferencia en Ginebra. Sobre el tema palestino, se repitieron los llamados a una solución con dos estados (Palestina e Israel) y las bienvenidas al reinicio de las negociaciones entre las partes, señaló.
Para Ashe, el debate general del 68 período de sesiones de la Asamblea representó la oportunidad de ubicar a la comunidad internacional sobre su situación actual y en las líneas de trabajo para trazar el camino hacia la meta deseada, el desarrollo sostenible.
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