El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) reiteró este lunes su pedido de dimisión al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, tras el escándalo de corrupción que lo menciona como presunto receptor de sobresueldos opacos.
Durante una reunión de su agrupación en la ciudad de Sevilla, el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, insistió por segundo día consecutivo en que Rajoy no puede seguir al frente del Ejecutivo español.
En el momento más difícil de la historia de España, tenemos al presidente con menos capacidad para conducir los destinos del país, denunció el líder de la principal fuerza de la oposición.
Opinó que el jefe del Gobierno y del conservador Partido Popular (PP) debe renunciar, porque las revelaciones sobre una supuesta contabilidad secreta en esa organización y la aparición de su nombre en una lista de cobro de retribuciones ilegales dificultan su trabajo.
Desde Berlín, Rajoy tildó este lunes de absolutamente falsas las anotaciones que indican pagos de sobresueldos en dinero negro aparecidas en unas cuentas manuscritas, presuntamente pertenecientes al extesorero del PP Luis Bárcenas.
Según esas informaciones, publicadas el pasado jueves por el diario El País, el propio gobernante recibió 25 mil 200 euros al año entre 1997 y 2008.
Las denuncias del citado periódico trascendieron dos semanas después de descubrirse que Bárcenas, imputado en un sonado caso de corrupción, pagaba gratificaciones en dinero negro a altos cargos del partido, que oscilaban entre los cinco mil y 15 mil euros mensuales.
Responsable de las finanzas del PP durante casi tres décadas, el también exsenador dimitió en 2009, tras ser incriminado por la Justicia en la llamada red Gürtel, trama corrupta que ese mismo año salpicó a connotados militantes de la ahora formación en el poder.
El otrora tesorero volvió a los primeros planos de la actualidad política tras conocerse, además, que dispuso de cuentas bancarias en Suiza, en las cuales llegó a acumular hasta 22 millones de euros, según fuentes jurídicas.
Frente a ese panorama, Rajoy no puede continuar en el Palacio de la Moncloa (sede del poder central), porque cómo va a pedir sacrificios a los españoles o se va a presentar ante los pensionistas a defender reformas para salir de la crisis, se preguntó Pérez Rubalcaba.
«Esa es la gravedad que estoy tratando de describir, si no fuera así, no habríamos tomado esta decisión (la de solicitar su dimisión), pero no nos hubiéramos perdonado si en un momento tan difícil no le hubiéramos dicho a los españoles la verdad de la situación», añadió.
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