Los espacios públicos en la Ciudad Museo del Caribe llegan renovados al medio milenio de fundación de la tercera villa cubana.
Antonio López desafía las alturas por un propósito mayor: asegurar que flores y fragancias escalen lo más empinado de la pérgola en el entorno de la Plaza Carrillo, que agradece estas labores de reanimación a las puertas del medio milenio de Trinidad.
Desde el último ascenso de la imponente estructura de hierro, que ha cedido tres veces a la furia de los vientos huracanados, no han llegado hasta la cúpula las típicas enredaderas que cubrían con flores y mieles uno de los sitios de más significación para los trinitarios; tal vez enero de 2014 regale las primeras enramadas florecidas.
“Cuando se levantó por última vez en el año 2009, cuenta este hombre sencillo y devoto al parque y sus flores, se reforzaron todas las uniones metálicas y la pérgola quedó muy segura, pero no se colocó suficiente alambre para que las ramas puedan trepar hasta lo más alto; ahora intento ayudar para que todo vuelva a ser como antes.”
Y un poco más abajo, en el parque de las Madres se reponen los bancos de vistoso mármol, a buen recaudo hasta garantizar más seguridad en su montaje. Hoy los mismos artesanos de la provincia Granma responsables de su confección, enaltecen este sitio de encuentros y de homenaje.
Pero los aires renovadores impulsados por el aniversario 500 de la tercera villa cubana alcanzan también a la otrora Plaza del Mercado, donde se amplía el escenario y se mejora toda la imagen de este espacio cultural.
Los espacios públicos en la Ciudad Museo del Caribe llegan renovados al medio milenio de fundación de la tercera villa cubana, a partir de un programa rectorado por la Oficina del Conservador y un financiamiento superior al medio millón de pesos en moneda total, que ha posibilitado embellecer no solo la plaza Carrillo, sino también la de Santa Ana, San Francisco, las Tres Palmitas y Segarte, además de los parques Punta Brava y la siempre encantadora Plaza Mayor, escenario principal de los festejos fundacionales.
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