A partir del 30 de enero el Ministerio de Salud Pública instituirá nuevas regulaciones para la entrada y estancia en los hospitales y salas de hospitalización de los policlínicos de toda Cuba.
Según anuncian las autoridades sanitarias de Cuba, a partir del 30 de enero los horarios de visita de los hospitales y de las salas de hospitalización de los policlínicos serán los martes y jueves, desde las cinco de la tarde, y los sábados y los domingos desde las dos de la tarde. En todos los casos el tiempo de visita no excederá una hora, excepto los domingos, cuando se extenderá a dos horas.
Tales regulaciones pretenden cortarle las alas al desmedido trasiego en las instalaciones sanitarias de la isla, debido a los perjuicios que dicha acumulación de personas puede provocar para la salud de quienes permanecen ingresados, las interferencias al adecuado funcionamiento intrahospitalario, el quebrantamiento del orden epidemiológico al posibilitar la adquisición y trasmisión de enfermedades y las agresiones a la higiene, que van desde la imposibilidad de mantener la limpieza necesaria, el incremento de los desechos, hasta el consiguiente descontrol vectorial.
Entre las nuevas medidas también se establece que solo será permitido un acompañante por paciente; no obstante, los casos que requieran una cifra superior a la establecida deben ser autorizados por la dirección del servicio médico correspondiente. Por su parte, el cambio de acompañante debe realizarse dos veces al día, de acuerdo con las características de cada institución.
Para quienes acompañan a los menores en los hospitales pediátricos se indica que deben permanecer junto al niño el tiempo que dure la hospitalización o ser sustituidos por otra persona que constituya una ayuda para la recuperación del paciente, pero tal cambio deberá aprobarse por el jefe de servicio.
Únicamente se restringen las visitas a las salas de atención a pacientes con enfermedades infectocontagiosas, diarreicas agudas; a salas de prematuros y recién nacidos, de cuidados intensivos, coronarios, de quemados y otras que se consideren, las cuales se regirán por las reglamentaciones existentes para cada uno de estos servicios.
No obstante, el documento ministerial instituye explícitamente una sola prohibición: se anulan las consultas ambulatorias a pacientes en las áreas de hospitalización.
Por su parte, las autoridades esclarecen que quienes visiten los hospitales, ya sea para recibir atención médica o acompañar a pacientes, deben respetar las normas de convivencia hospitalaria, no hacer ruidos innecesarios en las áreas de la institución, mantener correcto porte y aspecto, no fumar dentro del hospital, contribuir a la higiene y limpieza de los centros, no pasar a ninguna área sin la debida autorización, mostrar el pase de acompañante cuando sea solicitado y no establecer contacto físico con recién nacidos y puérperas sin las medidas de prevención de infecciones adquiridas.
En todos los casos -aclara el mencionado documento- las medidas organizativas y de control adoptadas no pueden interferir las actividades y el buen funcionamiento de las instituciones.
Extrictas medidas pero son necesaria y justas pues en sentido general muchas personas que visitan los hospitales por las razones ahora explicada no conocen de orden ni de ideas mucho menos de comportamientos sanos y des conocedores de las verdaderas disciplinas por lo que hay que romper las barreras del desorden mal sanas aprendidas por las diversas maneras aunque tenemos costumbres que por lo general son malos habitos o caprichos de indisciplina estas cosas son malos habitos que se encuentran lejos de la realidad pues estas no son ni estan estampadas en ningun registro como leyes por lo que nunca es tarde para aplicar las leyes cuando van en beneficio de los diversos paciente hospitalizados. Lazaro izquierdo