Las acciones incluyen cambio de carpintería, reposición de las luminarias, pintura, resanamiento de paredes y sustitución de redes hidráulicas y sanitarias.
Más de un centenar de consultorios médicos de la familia actualmente reciben beneficios constructivos, los cuales están dirigidos a mejorar el confort de estas instalaciones, deterioradas durante años.
Gonzalo Crespo Rodríguez, vicedirector de Inversiones, Mantenimiento y Electromedicina de la Dirección Provincial de Salud, precisó a Escambray que las acciones incluyen cambio de carpintería, reposición de las luminarias, pintura, resanamiento de paredes y sustitución de redes hidráulicas y sanitarias.
Según la propia fuente, pese a las mejoras estructurales de estas instalaciones, aún persisten deudas, sobre todo en lo referente al mobiliario. “Aunque se rescata, donde se puede, el mobiliario clínico y no clínico, existen insatisfacciones en cuanto a estos recursos para los cuales no hay todavía respuesta concreta. Entre los más solicitados y deficitarios se encuentran los bancos de espera para los pacientes y los burós para los galenos”, señaló.
Desde el 2011, fecha en la que se inició este programa de reparación y mantenimiento de dichas instalaciones, alrededor de 300 consultorios médicos han sido reparados, cifra que supera la mitad de los que hoy abren sus puertas.
En la provincia, luego del proceso de reorganización de los servicios de salud, funcionan 555 consultorios, la mayoría de los cuales cuentan con médico y enfermera.
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