El presidente Raúl Castro anunció la próxima inauguración de la primera etapa de la terminal de contenedores del Mariel, obra que apoya Brasil.
Al clausurar este sábado el segundo período de sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular, el mandatario calificó ese polo, al oeste de esta capital, como atractivo para la inversión extranjera, polígono de experimentación de modernas tecnologías y métodos de gestión empresarial.
Dijo que la inauguración en enero próximo de la primera etapa de la terminal de contenedores en ese puerto de aguas profundas se acompaña con la construcción de otras obras vitales de infraestructura.
La zona especial de desarrollo del Mariel se inscribe en la puesta en marcha de políticas y programas aprobados por el Partido Comunista de Cuba para la actualización del modelo socioeconómico de la isla.
El jefe de Estado cubano dijo que ese proceso continuará, sin prisa pero sin pausa.
Más adelante, Raúl Castro encomió la aprobación del nuevo Código del Trabajo, fruto de una amplia consulta popular en la que participaron más de dos millones 800 mil trabajadores.
Al respecto refirió las más de 620 mil intervenciones realizadas en asambleas sindicales que modificaron significativamente la versión inicial.
Sobre la marcha de la economía enfocó críticamente el crecimiento en 2,7 por ciento del Producto Interno Bruto, por debajo del 3,6 planificado.
Dijo que tal resultado estuvo condicionado fundamentalmente por la contracción del ingreso por servicios y productos de exportación, al tiempo que aumentaron los precios de necesarias importaciones.
No obstante, enfatizó, se lograron sostener en niveles similares los servicios sociales, en particular de salud y educación, que se brindan gratuitamente a la población.
Subrayó que pese al recrudecimiento del bloqueo de Estados Unidos contra Cuba, el país estuvo en condiciones de honrar sus compromisos financieros.
Con ello, insistió, la credibilidad internacional de la economía cubana prosigue su ascenso.
Vamos dejando atrás la visión del corto plazo condicionadas por urgencias e imprevistos. Ya estamos en condiciones de proyectar sobre bases sólidas y confianza en el futuro el desarrollo hasta el año 2030, concluyó.
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