El año que finalizó tuvo para el fomentense Yosvani Veitía el suficiente aval como para merecer otra vez su inclusión entre los mejores atletas espirituanos.
Aunque por el desenlace del “pleito” final el fajín llegó de forma atípica a su cuello, Yosvani Veitía lo disfrutó con un sabor especial.
No solo porque lo confirman como el mejor púgil cubano de los 49 kilogramos o porque su triunfo catapultó a su provincia a un inédito tercer lugar en torneos Playa Girón, sino porque lo obtuvo frente a su público, que por primera vez pudo aplaudirlo “en directo” en medio del Polideportivo Yayabo.
Sí, porque el muchacho no tuvo ni que subir al ring para buscar su corona, pues sus posibles rivales cayeron en semifinales uno por descalificación y otro víctima de un nocaut. De todas maneras, nada hacía presumir que no pudiera adjudicarse su segundo título en estos torneos y en términos generales, su tercero desde que debutó en el 2010 con presea de plata.
“Me siento muy contento por haber participado otra vez en el Girón y porque después de integrar hace dos años el equipo nacional, me puedo presentar por primera vez en mi provincia, lugar que me vio nacer y hacerme boxeador. Aquí, aunque era favorito, nunca me confié, no esperaba este final, quería darle el alegrón al pueblo peleando en el ring, pero gané y eso es lo importante”.
En dos años de carrera deportiva parece haber llovido poco, pero nada más lejos de la verdad. Después del bronce mundial juvenil del 2010 y el subtítulo panamericano de Guadalajara en el 2011, el año que finalizó tuvo para el fomentense el suficiente aval como para merecer otra vez su inclusión entre los mejores atletas espirituanos.
Varios títulos en la gira europea y una participación olímpica en Londres que le dejó un doble sabor: el de debutar en lides de tamaña envergadura y el de bajar del ring sin la medalla que soñó cuando en su segundo pleito cayó ante el multicampeón y doble titular olímpico Zou Shiming.
“Tuvimos una buena preparación para los Juegos Olímpicos desde el Campeonato Mundial, los Panamericanos, la gira por Europa, peleé con varios hombres, pero nunca me había enfrentado al chino, un púgil que tiene más experiencia, con más títulos, pero subí sin preocupación, sin temor a nada porque él tiene dos brazos igual que yo, subí a hacer mi pelea, no pude obtener la victoria, pero mis entrenadores estuvieron conformes con mi actuación”.
¿Y en lo personal estuviste conforme?
“Sí, cómo no, aunque esperaba una medalla porque me sentía bien, no perdí con nadie en el año, da la casualidad que me tocó cruzarme con el chino, pero me siento contento porque representé a mi país, a mi pueblo y todas las personas en la calle me han felicitad”.
¿Crees que el chino ganó por su nombre y sus títulos?
“Esa fue una decisión que tomaron los jueces, no puedo decir nada porque al final es otro púgil igual que yo”.
¿Vas por el desquite en el Mundial del 2013?
“Voy por una medalla, tengo tiempo para prepararme y para conocer mejor a los rivales nacionales e internacionales”.
El 2013 llega con nuevos retos. El más impactante no es siquiera el Campeonato Mundial o el resto de los torneos europeos a inicios de año; sino el retorno a los pleitos sin cabecera, una decisión adoptada por la Federación Internacional en busca del espectáculo y del gancho mediático.
“Sé que debo prepararme mucho mejor porque es sin cabecera y hay que acostumbrarse a pelear por este sistema, desde que se tomó la decisión, en el equipo nacional hemos entrenado sin ella, es difícil pero hay que adaptarse y echar pa’ lante”.
Dicen algunos que con cabecera el boxeo es menos boxeo.
“No es que sea menos, sino que los golpes tienen menos claridad, ahora lo que se busca es que haya más nocauts, tengo 20 años, más experiencia, sé que debo cuidarme más a la defensa para evitar los golpes”.
¿Te exige más técnica o más ofensiva?
“Yo entreno para ganar, cuando me subo al ring digo aquí estoy yo y hay que ganar”.
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