El gabinete de seguridad israelí refutó este viernes una propuesta de tregua que sería seguida de negociaciones para un cese de sus ataques contra zonas civiles en Gaza, que han causado casi 900 muertes.
La televisión oficial israelí dijo que el gobierno restringido «rechazó de manera unánime la propuesta de cese el fuego de (el secretario de Estado norteamericano, John) Kerry en su forma actual».
El anuncio era de esperar después que la ministra de Justicia israelí, Tzipora Livni, declaró el miércoles que los bombardeos y la invasión proseguirían hasta destruir los túneles cavados por los nacionalistas para burlar el bloqueo de ocho años impuesto a los palestinos de Gaza.
La proposición fue remitida tras contactos en El Cairo de Kerry con el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, quien llegó a la zona a principos de semana para contribuir a detener las matanzas cotidianas que han costado la vida a casi 900 civiles palestinos, en su mayoría mujeres y niños.
El Gobierno demandó que se permita al Ejército continuar destruyendo los túneles utilizados por el movimiento palestino Hamas para realizar ataques contra Israel, de los cuales no existen noticias a pesar de los persistentes asesinatos selectivos de dirigentes de esa organización.
La crisis en Gaza provocó hoy la continuación de protestas en la Cisjordania donde en los últimos tres días nueve palestinos han muerto a manos de tropas ocupantes o pobladores armados de los asentamientos sionistas, y decenas han sido heridos o arrestados.
Entre los hechos más horripilantes hoy en Gaza está el bombardeo por la artillería israelí de la unidad de cuidados intensivos de un hospital aquí que causó la muerte de 17 pacientes y provocó una ola de condena internacional.
Ban y John Kerry, contactaron con gobiernos regionales desde Egipto, en busca de una fórmula que obligue a Israel a detener sus bombardeos por aire, mar y tierra.
Una visita de improviso a Qatar del canciller turco, Ahmet Davutoglu, es uno de los resultados más visibles de las gestiones, aunque los signos de apaciguamiento son lejanos.
De su lado, el líder de Hamas, Khaled Meshaal, ratificó que no habrá cese de hostilidades sin levantamiento del bloqueo impuesto por Tel Aviv hace ocho años a la franja.
La tendencia que prima es que el establecimiento de cierta calma permitirá adelantar en las negociaciones para entrar en la sustancia del conflicto, provocado por las restricciones contra los gazatíes y los asesinatos selectivos de miembros de Hamas y de otras organizaciones palestinas.
El movimiento islamista palestino demanda garantías del cumplimiento de lo pactado por Israel, para que no se repita la situación del acuerdo de cuatro puntos adoptado en El Cairo en 2012 con la mediación de la entonces secretaria norteamericana de Estado Hillary Clinton, violado de inmediato por Tel Aviv.
Entre los puntos está el cese del bloqueo y el levantamiento de las restricciones a la pesca en la franja costera de Gaza y el cese de los ataques a los campesinos de zonas próximas a la línea de demarcación entre esta franja e Israel a los que se impide trabajar sus tierras.
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