Representantes de Ecuador, Nicaragua, Guatemala y Honduras manifestaron su respaldo al proceso argentino de reestructuración de su deuda soberana ante la amenaza de los denominados fondos buitre.
Durante una cita extraordinaria de la Organización de Estados Americanos (OEA), el ministro ecuatoriano de Finanzas, Fausto Herrera, criticó el rechazo de la Corte Suprema de Estados Unidas a la apelación de Argentina contra una decisión del juez norteamericano Thomas Griesa favorable a los mencionados fondos especulativos.
Afirmó que ese fallo es contra las políticas inclusivas, contra el pago de la deuda social emprendidos por el gobierno de la nación del Cono Sur.
Griesa dictaminó que se priorice el pago de los fondos buitres, por un monto ampliamente superior a los mil millones de dólares, pero que pudiera multiplicarse hasta alrededor de la mitad de las reservas monetarias argentinas.
Los titulares de dichos fondos no se acogieron a la renegociación de la deuda aceptada por el 92,4 por ciento de los acreedores de Argentina.
Señaló que estos actores financieros aprovechan para invertir momentos en que los países se encuentran con limitadas alternativas de financiamiento en los mercados de capital a fin de cobrarlos luego a precios mucho más elevados, es decir, que especulan con las expectativas de desarrollo de las naciones.
Por ello, el titular apostó por la consolidación de una nueva arquitectura financiera en el área, sustentada en el Banco del Sur -para la inversión-, un fondo común de reservas y un sistema de pagos que elimine el uso de una moneda extrarregional.
Advirtió asimismo sobre el riesgo sistémico que entraña el dictamen de la justicia norteamericana, el cual -apuntó- prioriza a los especuladores sobre los inversionistas de buena fe y establece un orden predatorio al exigir el pago inmediato y en efectivo.
Por su parte, el vicecanciller de Nicaragua, Denis Moncada, advirtió que es necesario garantizar el respeto a los procesos de reestructuración de deudas soberanas según los acuerdos entre deudores y tenedores de títulos.
En consecuencia, condenó aquellas medidas coercitivas que obstaculicen tales procesos.
El canciller guatemalteco, Fernando Carrera, reconoció que Argentina cumple su compromiso con los acreedores y destacó que el gobierno de Buenos Aires no cuestiona a estos sino a quienes han apostado por la especulación.
Es un cuestionamiento a un fallo judicial que está en contra de la renegociación de la deuda y amenaza la soberanía de ese país y de todos los estados latinoamericanos y caribeños así como la estabilidad financiera mundial, añadió.
En tanto, la ministra hondureña de Relaciones Exteriores, Mireya Agüero, recordó que Latinoamérica está en un momento crucial para sanear sus presupuestos y poder proveer de mejores oportunidades a sus ciudadanos y por eso es comprensible el trasfondo humano de la preocupación expuesta por Argentina.
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