Escambray Periódico de Sancti Spíritus
Con más elementos que nunca en contra de lo que Washington llama embargo, la Asamblea General de la ONU analizará este martes y llevará a votación por 23 ocasión consecutiva el tema del bloqueo de Estados Unidos hacia Cuba, donde se pronostica una contundente victoria de rechazo a esa política hostil.
ONU: por vigésima tercera ocasión Cuba presenta resolución contra el bloqueo
Se vaticina también un arreciamiento de las condenas a tal engendro, en un clima preparado por un editorial de The Washington Post del 4 de octubre pasado sobre el tema, seguido de tres artículos consecutivos de The New York Times dedicados a Cuba, dos de ellos acerca de lo inoportuno e inoperante del bloqueo, y uno para reconocer el singular aporte de la isla en la lucha contra el ébola,
En un ambiente en que diversas personalidades de la política estadounidense lo critican como la ex secretaria de Estado Hillary Clinton y el ex gobernador del estado de la Florida, Charlie Crist, , cada vez son más los políticos que rechazan el injusto y criminal “embargo”, y mayor el porcentaje de ciudadanos comunes que se le oponen.
Por si fuera poco, en previo análisis sobre el tema efectuado en Naciones Unidas, varios embajadores, en su mayoría latinoamericanos, expresaron sin reservas su rechazo categórico a esa práctica estadounidense, violatoria de la Carta de la ONU, de los fundamentos jurídicos internacionales que rigen las relaciones entre los estados, y los preceptos de la Organización Mundial de Comercio (OMC), entre otros.
En las intervenciones, como las del boliviano Sacha Llorenti, la nicaragüense María Rubiales y el ecuatoriano Xavier Lasso, no faltaron las calificaciones de genocida y criminal, entre otros adjetivos referidos al bloqueo, y la exigencia de que tal política sea erradicada y se establezcan tratativas civilizadas entre Washington y La Habana en beneficio de los pueblos cubano y norteamericano.
Por lo pronto, y después de acciones tan negativas como las de las multas exorbitantes impuestas por la OFAC estadounidense al banco francés BNP Paribas y las presiones al Banco de Irlanda, entre otros actos hostiles contra la isla, EE.UU. no ha hecho más que generar mayor oposición entre sus asociados de la Unión Europea y darle al gobierno cubano aún mayores argumentos para rechazar una guerra económica que ha costado al pueblo cubano la exorbitante suma de un billón 112 mil 534 millones de dólares.
De ahí que sea tan seguro el merecido apabullamiento de Washington en la ONU, acompañado como siempre por su perro de presa israelí y quizás algún otro lacayo que aspire o dependa de las migajas del Imperio.
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Escambray / ISSN 9664-1277
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