El molino Ángel Montejo amplía las entregas del residuo del proceso de secado con destino a la cobertura de alto horno, lo que sustituye importaciones y beneficia el medio ambiente.
Nunca las cenizas del secado de arroz que se derivan de la quema de la cáscara en el molino Ángel Montejo serán más importantes que el grano tributado por la planta para el consumo humano; sin embargo, el agresivo desecho se ha convertido en un útil recurso en virtud de ampliarse su empleo para la cobertura de la fundición de alto horno en industrias del país, lo cual sustituye importaciones de esa materia prima de elevado costo en el mercado foráneo.
Encontrarles mercado a las cenizas tiene otro impacto tan valioso como el aporte económico: el ambiental, porque hasta hace tres años se botaban indiscriminadamente, mientras está considerado un residuo peligroso capaz de provocar la enfermedad profesional conocida como silicosis, causada por la inhalación de sílisis.
Humberto Gómez Valdivia, especialista de Mantenimiento en la Unidad Empresarial de Base Ángel Montejo de Sancti Spíritus, comentó a Escambray que, luego de transitar en el 2012 por una fase experimental en la comercialización del desecho, ya en el 2013 las entregas alcanzaron las 65 toneladas y para el presente año planifican vender unas 300 a la Empresa Refractarios Habana, entidad que lo distribuye a las industrias Antillana de Acero, en la capital, y Acinox, en Las Tunas.
Explica además que el aumento este año de los niveles de molinado y secado proporciona mayor cantidad de cenizas, de ahí el despegue en la comercialización, actividad favorecida a la hora de su traslado por el empleo de bolsas de gran tamaño, lo cual evita riesgos ambientales.
De acuerdo con el especialista, el aporte que hace el molino es apreciable, pues una tonelada de este residuo tiene un precio en el mercado exterior de 600 dólares, en tanto la planta logra un ingreso de 170 CUC —Pesos Convertibles Cubanos— por cada tonelada del desecho que envía a la fundición de alto horno.
Asevera la propia fuente que el Ángel Montejo es la única industria cubana que tributa ese residuo, por demás limpio y manejable, y de hecho se ha convertido en el producto líder en la empresa arrocera de la provincia en cuanto al cuidado del medio ambiente.
“Estamos interesados en patentizar el producto, atraer a la Universidad para que incursione en estos procesos tecnológicos y ya se habla a escala del Ministerio de la Agricultura de tratar de irradiar la experiencia del molino a otras industrias arroceras de la isla, con la perspectiva, incluso, de que esos residuos puedan convertirse un día en fondos exportables”, sostiene Humberto Gómez.
Confirma el especialista que la producción de cenizas no afecta cubrir las necesidades de cascarilla de arroz que demandan las empresas Avícola y Porcina del territorio y apunta que ese desecho de la combustión puede emplearse también en terrenos de la Agricultura Urbana y como aligerante en perfiles de la construcción.
A raíz de introducirse años atrás el secado de arroz en la industria ubicada en la barriada de Colón, la adaptación tecnológica para ese proceso contempló la utilización de la cáscara como combustible, en tanto se convirtió en la única planta del país que hace ese procesamiento con los residuos del molinado, eslabón de donde sale la ceniza comercializada ahora hacia la industria siderúrgica.
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Silicosis
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Es una enfermedad respiratoria causada por inhalar polvo de sílice.
Causas
El sílice es un cristal común que se presenta naturalmente. Se encuentra en la mayoría de los lechos rocosos y forma polvo durante el trabajo con minería, la explotación de canteras, la construcción de túneles y al trabajar con muchos minerales metálicos. El sílice es un componente principal de la arena, por lo que las personas que trabajan con vidrio y chorreado de arena también están expuestas a este elemento.
Se presentan tres tipos de silicosis:
Silicosis crónica simple: resulta de la exposición a largo plazo (más de 20 años) a bajas cantidades de polvo de sílice. Este polvo causa inflamación en los pulmones y ganglios linfáticos del tórax. Esta enfermedad puede hacer que las personas tengan dificultad para respirar y es la forma más común de silicosis.
Silicosis acelerada: se presenta después de la exposición a cantidades mayores de sílice en un período más corto (5-15 años). La inflamación en los pulmones y los síntomas ocurren más rápidamente que en la silicosis simple.
Silicosis aguda: resulta de la exposición a cantidades muy grandes de sílice durante corto tiempo. Los pulmones se inflaman bastante y se pueden llenar de líquido, causando una dificultad respiratoria grave y bajos niveles de oxígeno en la sangre.
Se puede presentar fibrosis masiva y progresiva en la silicosis simple o acelerada, pero es más común en la forma acelerada. Dicha fibrosis masiva y progresiva causa cicatrización grave y destruye estructuras pulmonares normales.
Las personas que se desempeñan en trabajos en donde están expuestos al polvo de sílice están en riesgo. Estos trabajos comprenden:
Fabricación de abrasivos
Fabricación de vidrio
Minería
Trabajo en canteras
Construcción de carreteras y edificios
Chorreado de arena
Corte de piedra
La exposición intensa al sílice puede causar esta enfermedad en un año, pero, por lo general, toma al menos 10 o 15 años de exposición antes de que se presenten los síntomas. La silicosis se ha vuelto menos común desde que la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (Occupational Safety and Health Administration, OSHA) estableció regulaciones que exigen el uso de equipo protector que limita la cantidad de polvo de sílice que los trabajadores inhalan.
Síntomas
Tos
Dificultad respiratoria
Pérdida de peso
Pruebas y exámenes
El médico elaborará la historia clínica que incluye muchas preguntas acerca de los trabajos (pasados y presentes), los pasatiempos y otras actividades que puedan haberlo expuesto al sílice. El médico también hará un examen físico.
Los exámenes para confirmar el diagnóstico y descartar otras enfermedades similares abarcan:
Radiografías de tórax.
Tomografía computarizada del tórax.
Pruebas de la función pulmonar.
Prueba cutánea con derivado proteico purificado (PPD) (para detectar tuberculosis).
Pruebas serológicas para detectar enfermedades del tejido conectivo.
Tratamiento
No existe un tratamiento específico para la silicosis, pero es importante retirar la fuente de exposición al sílice para evitar el empeoramiento de la enfermedad. El tratamiento complementario comprende antitusígenos, broncodilatadores y oxígeno, si es necesario. Se prescriben antibióticos para las infecciones respiratorias en la medida de lo necesario.
El tratamiento también comprende limitar la exposición a sustancias irritantes, dejar de fumar y hacerse pruebas cutáneas de rutina para tuberculosis.
Las personas con silicosis presentan un alto riesgo de desarrollar tuberculosis (TB), ya que se cree que el sílice interfiere con la respuesta inmunitaria del cuerpo a la bacteria que produce la TB. Las personas con silicosis deben practicarse pruebas cutáneas para verificar la exposición a TB y aquéllas que resulten con una prueba cutánea positiva deben recibir tratamiento con medicamentos antituberculosos. Cualquier cambio en el aspecto de una radiografía de tórax puede ser un signo de tuberculosis.
Los pacientes con silicosis grave pueden necesitar un trasplante de pulmón.
Grupos de apoyo
El hecho de unirse a un grupo de apoyo donde la persona se puede reunir con otras personas que padecen silicosis o enfermedades conexas puede ayudar a comprender la enfermedad y adaptarse a sus tratamientos.
Pronóstico
El desenlace clínico varía dependiendo de la magnitud del daño a los pulmones.
Posibles complicaciones
Enfermedad del tejido conectivo, como artritis reumatoidea, esclerodermia (también llamada esclerosis sistémica progresiva) y lupus eritematoso sistémico
Cáncer pulmonar
Fibrosis masiva y progresiva
Insuficiencia respiratoria
Tuberculosis
Cuándo contactar a un profesional médico
Consulte con el médico si está expuesto al sílice en su trabajo y presenta síntomas de la enfermedad.
Prevención
Si usted se desempeña o tiene un trabajo o pasatiempo de alto riesgo, use máscaras antipolvo y no fume. Asimismo, podría usar otra protección recomendada por la OSHA, como una mascarilla de respiración.
Nombres alternativos
Silicosis crónica; Silicosis aguda; Silicosis acelerada; Fibrosis masiva y progresiva; Silicosis conglomerada; Silicoproteinosis