Las investigaciones propuestas para premios nacionales relacionadas con el control del proceso industrial del arroz consumo y la dualidad monetaria y cambiaria en la empresa pesquera Sancti Spíritus, constituyen apenas dos ejemplos del actuar a tono con su tiempo de los economistas de la provincia.
Los alrededor de 3 100 afiliados de la Asociación Nacional de Economistas y Contadores de Cuba (ANEC) en Sancti Spíritus, quienes el 26 de noviembre celebrarán los 35 años de esa organización, se mantienen vinculados con aportes concretos a la actualización del modelo económico como su primera prioridad.
Esther Cira Gómez, vicepresidenta de la organización aquí, comentó a Escambray que en los diferentes sectores ese gremio ha aportado su grano de arena: los bancarios han impartido varias conferencias sobre la unificación monetaria y cambiaria; la ONAT aborda la actualidad del sistema tributario, incluidas las modificaciones de los impuestos sobre las ventas; mientras que los auditores participan en la IX Comprobación Nacional al Control Interno y sistemáticamente mantienen considerable protagonismo en la lucha contra el delito, la corrupción y las ilegalidades.
Además, de conjunto con la CTC, laboraron en la divulgación y argumentación del nuevo Código de Trabajo; han impartido —vinculados con Educación— tres ediciones del curso de técnicas básicas de Contabilidad con cientos de graduados; y sistemáticamente participan en los estudios de factibilidad para los nuevos proyectos de desarrollo local.
Los economistas espirituanos han mantenido durante años el asesoramiento a las unidades de Salud y próximamente comenzarán similar labor en centros de Comercio en su tránsito hacia las nuevas formas de gestión, en dependencias del Inder que lo precisen y apoyarán a la ANCI con cursos sobre el presupuesto y el control interno.
Igualmente, han desarrollado múltiples investigaciones en busca de soluciones para los problemas concretos de cada entidad; y mantienen un estrecho vínculo con los estudiantes de la especialidad, a quienes después de graduados incorporan a la asociación y dan seguimiento a través de los talleres de adiestrados, donde constatan el tratamiento recibido y sus resultados en los centros en los cuales resultaron ubicados.
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