El presidente Rafael Correa alertó este martes sobre intentos de promover en Ecuador procesos de desestabilización similares a los ocurridos en Venezuela, al referirse a una manifestación convocada para este miércoles por la oposición.
«Quieren ver si les resulta», afirmó el mandatario durante la inauguración de un puente que une la ciudad costera de Durán con la isla Santay.
La marcha está convocada por quienes Correa calificó de supuestos líderes sindicales, y se han unido dirigentes indígenas opositores y estudiantiles.
El jefe de Estado cuestionó las razones que esgrimen para hacer la protesta, como estar en contra de la reelección presidencial y de la política laboral de la Revolución Ciudadana.
En este sentido, resaltó cuán contradictoria resulta esa postura de líderes sindicales contra un gobierno que, por ejemplo, eliminó la tercerización del trabajo (una forma indirecta de contratación) y elevó los salarios a nivel nacional hasta convertirlos en los más altos de la región andina.
Asimismo, recordó que durante su gestión se comenzó a exigir a las empresas declarar sus utilidades y repartir un 15 por ciento de ellas entre los trabajadores.
Correa mencionó que además se obligó a las entidades a afiliar a sus empleados al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social, para así garantizarles beneficios como la jubilación.
El Presidente convocó a la ciudadanía ecuatoriana a también salir a las calles para demostrar que «somos más, somos muchos más».
«No cederemos ante los absurdos y ante la sinrazón, (…) nosotros también podemos protestar ante ese pasado ilegítimo que quiere regresar y la doble moral de cierta dirigencia sindical», aseveró.
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