Abel Roig Santos y Santos Caraballé Abreu, jóvenes dirigentes revolucionarios fueron asesinados por bandidos en la zona de Perea hace 50 años.
Aquel 6 de mayo de 1964, los jóvenes revolucionarios Abel Roig Santos y Santos Caraballé Abreu regresaban cansados, pero optimistas, de una reunión de promoción de la Batalla por el Sexto Grado en la escuela de Los Ramones, en la zona de Perea, en el municipio de Yaguajay.
Próximas las 10:30 p.m. el jeep en que viajaban recibió una granizada de balas, disparada por bandidos al mando del cabecilla Mario Bravo. Santos y Abel murieron instantáneamente, mientras Lorenzo Hernández, secretario de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) del Seccional Venegas-Perea, resultó gravemente herido.
El eco de los disparos alertó a los pobladores del lugar. De inmediato los milicianos cogieron las armas y corrieron a ocupar sus puestos. Al poco rato la triste noticia se esparció por el pueblo y un manto de consternación y dolor —y también de rabia— abatió a quienes conocían a los jóvenes asesinados.
El Caín del capitalismo golpeó a Abel desde su humilde cuna en el hogar formado por Antonio Roig y Eumelia Santos, allá en Las Varas, barrio de Zaza del Medio. Cuando Abelito apenas contaba 3 años fallece la madre y él queda al amparo de un primo de esta nombrado Cirilo Santos. Al cumplir los siete, su familia es desalojada por la Guardia Rural. Se mudan entonces para la finca El Blanquizal, donde se dedican al cultivo de la tierra.
Al triunfo de la Revolución es intervenida la finca de la que Abel y los suyos habían sido despojados. Ellos regresan y al ser creada allí la cooperativa Benito Concepción figuran entre los fundadores. El joven se integra a las Milicias y participa en la Limpia del Escambray, luego retorna y lo envían para Matanzas a estudiar en la Escuela Automotriz Augusto C. Sandino. De nuevo en su terruño encuentra la cooperativa transformada en la granja del pueblo Mártires de Bellamota y lo nombran responsable del taller de maquinaria.
Su vida marca una espiral de ascensos, pues en
febrero de 1962 ingresa en la UJC, después lo eligen trabajador vanguardia y más tarde obrero ejemplar, luego se incorpora al Partido Unido de la Revolución Socialista, es promovido a secretario general de su núcleo y más tarde, a secretario de Educación del Seccional del Partido en Venegas-Perea.
Quizá con la influencia de haber nacido el 23 de octubre de 1939 en la finca Los Hondones, desde donde Serafín Sánchez se lanzara machete en mano a la Guerra del 68, el niño Santos Caraballé sobresalía por su entereza y espíritu de superación constantes.
Siendo aún adolescente, empieza a trabajar en la finca El Recreo, donde sus padres son aparceros. Allí afronta junto con ellos y sus tres hermanos el constante temor al desalojo y al agobio por las altas rentas. Por eso la Revolución triunfante lo tiene entre sus más entusiastas propulsores. Por eso también ingresa en las Organizaciones Revolucionarias Integradas, y poco tiempo después, en un núcleo del Partido Unido de la Revolución Socialista.
No fue extraño entonces que Santos Caraballé estuviera en las filas del ejército de alfabetizadores y que, una vez que Cuba fue declarada Territorio Libre de Analfabetismo, pasara a ser maestro y, más tarde, activista de Educación.
Siendo ya dirigente de la UJC, Santos promueve la Revolución Técnica preconizada por Fidel, uno de cuyos primeros pasos era la Campaña por el Sexto Grado, y en esas funciones estaba junto a su amigo Abel, realizando las asambleas de compromiso entre los pobladores de la zona cuando en su camino se interpuso el odio.
EL QUE A HIERRO MATA…
El dolor que provocó la muerte de Santos y Abel y el daño que sus victimarios hacían a la obra revolucionaria determinaron que se les persiguiera sin descanso hasta su captura poco tiempo después en Blanquizal, próximo al lugar de sus fechorías más recientes.
Fue una emboscada en la que resultaron eliminados la mayoría de los integrantes de la banda, y tuvieron que rendir cuentas ante la justicia del pueblo el resto de aquellos asesinos y ladrones, fieles ejecutores de las órdenes de una potencia extranjera.
Pastor muy interesante su artículo ,como todos los que escribe ,conocía parte de este relato que usted hoy nos hace ,y conozco también los lugares donde ocurrieron los hechos ,ojala y siempre podamos contar con personas como usted que no dejan morir los detalles de la historia . Personalmente le conozco y es una pena que a veces no podamos conversar más le admiro y respeto mucho. Éxitos.