Un investigador interno del gobierno de EE.UU. averigua si el denominado Zunzuneo, programa para crear una red social con fines subversivos contra Cuba, tuvo la supervisión adecuada.
De acuerdo con la página digital del diario The Washington Post, la pesquisa se centrará en los procedimientos usados por la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid), para burlar las leyes cubanas sobre el acceso a internet.
El Congreso norteamericano ejecuta una investigación sobre el caso luego que la agencia Associated Press (AP) corroboró semanas atrás reiteradas denuncias del gobierno de La Habana sobre el patrocinio por parte de Washington de planes para impulsar a la juventud cubana hacia la contrarrevolución.
De acuerdo con la agencia noticiosa, más de mil documentos confirmaron la creación en 2010 de la red de comunicación Zunzuneo, promovida por la Usaid, cuyo propósito era hacerse popular entre los jóvenes para luego «empujarlos hacia la disidencia».
De acuerdo con AP, los usuarios nunca supieron que el proyecto implementado mediante empresas fachada financiadas desde bancos extranjeros, estaba vinculado al Departamento de Estado, ni que los contratistas estadounidenses reunían sus datos personales con propósitos políticos.
Varios legisladores, entre ellos el senador Patrick Leahy, demócrata por Vermont, criticaron con dureza el plan y cuestionaron hasta dónde el Congreso fue informado del mismo, e incluso lo calificaron de absurdo.
La Comisión de Relaciones Exteriores del Senado ordenó una revisión de ZunZuneo y de la Usaid, además de la entrega de toda la documentación sobre esa plataforma subversiva contra Cuba.
Solicitó, además, conocer los mensajes que el gobierno o sus contratistas transmitieron a los suscriptores en la nación caribeña, atendiendo a que los destinatarios nunca fueron informados de la implicación del gobierno estadounidense en la llamada red de comunicaciones.
Analistas políticos opinan que las acciones de la Usaid son además de contraproducentes para la política estadounidense, una violación absoluta de la soberanía de La Habana.
Existe una abismal diferencia entre los programas de ayuda para el desarrollo de la democracia y los derechos humanos y el tipo de operaciones clandestinas que la Usaid ha estado ejecutando en Cuba dirigidas al cambio de régimen, señaló el periodista Peter Kornbluh en un artículo publicado en el diario The New York Times.
El Ministerio de Relaciones Exteriores cubano advirtió que el plan del gobierno de Estados Unidos de crear una red social con fines desestabilizadores demuestra que Washington persiste en sus programas subversivos contra esa nación.
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