Cuba ratificó este martes en Naciones Unidas su disposición a contribuir con el desarrollo socio-económico de los países necesitados e instó a los de mayores recursos a mostrar voluntad política para ayudar a otros.
«Por nuestra parte, reiteramos la firme decisión de continuar compartiendo, en la medida de nuestras posibilidades, el capital humano creado por la Revolución y las mejores experiencias que poseemos, los cuales son nuestra única riqueza», afirmó la tercera secretaria de la Misión Permanente cubana aquí, Daylenis Moreno.
Al intervenir en la Tercera Comisión de la Asamblea General de la ONU, la diplomática recordó algunas muestras de la cooperación ofrecida por la isla a naciones del mundo.
En estas cinco décadas, 325 mil trabajadores de la salud han asistido a 158 estados del Sur, y se han formado gratuitamente 38 mil médicos de 121 países, todo lo anterior sin exclusiones ni condicionamientos, señaló en el grupo de la Asamblea encargado de los asuntos sociales, humanitarios y culturales.
Asimismo, destacó el empleo del programa de alfabetización cubano Yo, sí puedo en casi 30 naciones y la devolución de la vista, también de forma gratuita, a cientos de miles de seres humanos de diversas latitudes.
De acuerdo con Moreno, la postura de su país se enmarca en un orden económico y político internacional profundamente injusto e insostenible, en el que el Sur sigue sufriendo las actuales distorsiones.
A lo anterior se agrega la carga de las crisis económica, financiera, alimentaria y energética, el impacto negativo del cambio climático y un escenario de pobreza extrema, hambre, analfabetismo, insalubridad y muerte prematura, expuso.
La diplomática advirtió que tan nefasto panorama podría cambiar si los países ricos tuvieran voluntad política y aportaran recursos, o al menos cumplieran con su prometida asistencia oficial al desarrollo.
En su intervención en la Tercera Comisión, Moreno resumió los avances de Cuba en materia de inclusión social, alcanzados pese al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos a la isla desde hace más de medio siglo.
Nuestro pequeño país en desarrollo ya cumplió los objetivos del milenio, y en algunos casos los superó, dijo.
Cuba presenta una mortalidad infantil de 4,2 por cada mil nacidos, -entre las más bajas del mundo-, una esperanza de vida al nacer de 78 años, la salud y la educación están al alcance de todos de forma gratuita y no hay analfabetos.
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