Para el espirituano Yosbani Veitía llegó la hora de la verdad cuando este viernes se inicie en Azerbaiján la gran final de la Serie Mundial de Boxeo, pues el muchacho tendrá delante la mayor prueba de fuego de su corta carrera.
Hasta ahora la mejor “nota” del fomentense es la medalla de bronce obtenida en el Campeonato Mundial del pasado año y la presea del mismo color lograda en el torneo del orbe durante su paso por la categoría juvenil.
Aunque incursionó en los Juegos Olímpicos de Londres en el 2012, Veitía no pudo avanzar hasta la discusión de las medallas.
No obstante, estos y otros eventos le han servido para ir creciendo sobre el ring después que se dio a conocer en el mundo boxístico en el 2010 durante el Torneo Nacional Playa Girón
Pero desde su debut en la Liga, Veitía ha sido poco menos que imbatible. Con siete victorias en igual número de salidas resulta el púgil de mayor cantidad de triunfos en la armada cubana.
Su pleito tiene una doble connotación. En lo personal un triunfo pudiera ser su consagración de los 49 kilos en la arena internacional y en lo colectivo pudiera ser el oxígeno para empezar con el pie derecho, pues será el primero de los cinco hombres cubanos que deben subir al cuadrilátero.
Si la lógica se impone, y se sabe que en el deporte esta no siempre funciona, el muchacho debe salir airoso ante Khamza Nametov, un hombre al que ya venció en este propio torneo.
El espirituano se ha mostrado muy fuerte en su división desde que subió a pelear ante Joselito Velázquez, un mexicano que se había convertido en su verdugo y de hecho lo fue en los Juegos Panamericanos de Guadalajara cuando cedió en la final por el oro en un pleito que algunos le vieron ganar.
Ahora su mayor rival, pudiera ser otra vez el escenario contrario, aunque Veitía ha podido sortear muy bien este obstáculo. También la presión psicológica de saberse el iniciador, pero sin dudas el fomentense parece dispuesto a afianzarse en la cima del ranking mundial de su división.
Pero no es solo la hora de Veitía. Sin llegar aún el desenlace puede decirse que Cuba pasó la principal prueba de fuego: avanzar a finales en un evento al que asiste por primera vez y donde debió apelar a todas las estrategias posibles para ir aprendiendo de él en medio de la candela, pese a que no pueda decirse que el torneo se haya distinguido por la calidad total de los contendientes.
Domadores de Cuba y Bakú Fires Azeríes se alistan para una batalla campal de dos días en un pleito donde los segundos van con la ventaja que siempre representa pelear en casa y también por su resonante demostración en semifinales ante Arlans Astaná Kazajos, el campeón defensor.
Pero no son los cubanos venidos a menos, ni gente que se conforma con llegar y no pasarse. Con un equipo donde consagrados y bisoños han tenido similar protagonismo, obligaron a sus rivales a mirarlos por encima del hombro, mucho más cuando pasaron por encima de los rusos de forma aplastante.
Incluso ante sus rivales por el oro salieron airosos dos veces, aunque de manera cerrada 3-2, no obstante una cosa es con guitarra y otra…
Otro elemento favorable es que seis de sus diez hombres encabezan el ranking de sus divisiones.
Para el boxeo cubano es también otra hora de redención, luego que en Londres 2012 comenzó a retomar las riendas como la locomotora del deporte cubano que siempre fue.
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