Escambray Periódico de Sancti Spíritus
La provincia de Sancti Spíritus aportó el café planificado en la cosecha 2014-2015 y sobresale en el avance en el proceso de despulpe
La colada de la cosecha cafetalera 2014-2015, aún sin concluir, deja ya un mejor sabor como quiera que la provincia alcanza las dos cifras productivas planificadas: 813 toneladas de café cereza
—antes de despulpar— y las 144 toneladas de café oro
—procesado—, indicador este último que representa un crecimiento con respecto a la anterior campaña en unas 37 toneladas.
La contienda iniciada en septiembre y prevista a terminar en febrero está lejos de satisfacer la demanda, pero constituye una clara señal de la recuperación agrícola del cultivo luego de que, años atrás, se emprendiera un programa de transformación que comienza a cambiar la cara del principal renglón económico de las zonas montañosas y que actualmente ubica al 80 por ciento de la plantación rejuvenecida.
El impacto de la renovación se constata en los resultados de la cosecha, pues la recolección se asienta solo en el 46 por ciento del cultivo —el resto está en diferentes fases de desarrollo—, una prueba inequívoca del favorable rendimiento de las matas nuevas.
Leosvaldo Cruz Duardo, especialista principal de café en Sancti Spíritus, informó que la mejor organización de las fuerzas agrícolas, el trabajo agrotécnico, la entrada de insumos y el incremento del rendimiento figuran entre las razones que respaldan el desempeño de la campaña, a la vez que el territorio tiene posibilidades de elevar el aporte productivo hasta unas 150 toneladas.
Como una nota distintiva el especialista identifica la penetración del despulpe en el procesamiento industrial, consiguiéndose llevar el beneficio al 87 por ciento de la variedad arábica y al 80 de la robusta.
El funcionamiento de tres máquinas despulpadoras ecológicas ha permitido modernizar ese escalón, que redunda en la calidad del grano y propicia también que la provincia aporte las cantidades de café previstas para la exportación.
Precisa Cruz Duardo que el programa de manejo integrado contra la enfermedad de la broca denota un seguimiento satisfactorio y se reducen los índices de infestación e imperfección en los granos, con lo cual mejora la calidad del café, un renglón que tiene en las zonas altas —Gavilanes y Topes de Collantes— los escenarios más idóneos para obtener un producto de rango exportable.
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Escambray / ISSN 9664-1277
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